Vasectomía sin bisturí: el método de anticoncepción masculina que rompe mitos

En los últimos años, la vasectomía ha ganado popularidad como una opción confiable y segura para el control de la natalidad. A pesar de los mitos y tabúes que la rodeaban históricamente, cada vez más hombres se están sometiendo a este procedimiento.

Según datos de DKT, una ONG especializada en salud sexual y reproductiva, el 48% de los hombres que optan por la vasectomía tienen entre 30 y 39 años, y el 71% ya son padres.

Una de las principales razones por las que los hombres eligen este método es el deseo de compartir la responsabilidad anticonceptiva con sus parejas, evitando los efectos secundarios de los métodos hormonales en las mujeres.

¿En qué consiste la vasectomía sin bisturí?

A diferencia de los métodos convencionales, la vasectomía sin bisturí es un procedimiento ambulatorio que no requiere hospitalización ni suturas.

De acuerdo con Matías Sepúlveda Jara, experto en la técnica, en el consultorio de DKT se realizan más de 1,900 vasectomías al año utilizando la técnica de interposición de fascia, que consiste en cortar y sellar los conductos deferentes con un tejido natural, bloqueando el paso de los espermatozoides sin afectar la eyaculación ni la función sexual.

Desmitificando la vasectomía: ¿Afecta la eyaculación o la virilidad?

Uno de los principales obstáculos para que más hombres elijan la vasectomía es la desinformación. Algunos de los mitos más comunes son:

• "La vasectomía afecta la eyaculación y el deseo sexual." Falso. La cantidad de semen expulsado permanece igual, ya que proviene de la próstata y las vesículas seminales. La única diferencia es que no contiene espermatozoides.

• "Es una castración y afecta la producción de testosterona." Falso. La producción de testosterona ocurre en los testículos y las glándulas suprarrenales, por lo que la vasectomía no interfiere con esta producción.

• "No es reversible." Parcialmente cierto. Existen procedimientos, como la vasovasostomía, para revertirla, pero estos pueden ser costosos y no garantizan el éxito total. Sin embargo, técnicas modernas, como los mini clips de titanio, incrementan las posibilidades de una reversión efectiva.

Recuperación y cuidados postoperatorios

El procedimiento dura entre 5 y 15 minutos, y el paciente puede regresar a su hogar el mismo día. Se recomienda lo siguiente en el postoperatorio:

• Aplicar hielo en la zona para reducir la inflamación.
• Evitar actividades físicas intensas durante la primera semana.
• No sumergirse en albercas o jacuzzis en los primeros días para prevenir infecciones.
• Usar ropa interior ajustada para dar soporte al área escrotal.

En cuanto a la actividad sexual, se aconseja esperar al menos siete días para evitar molestias. Es importante recordar que la vasectomía no es efectiva de inmediato: se deben esperar 90 días y al menos 25 eyaculaciones para asegurarse de que no haya espermatozoides en el semen, lo que se confirma mediante un estudio de espermatobioscopía.

Un acto de amor y responsabilidad

Para muchos hombres, la vasectomía no es solo un método anticonceptivo, sino un acto de amor y responsabilidad hacia su pareja y su familia.

“Cada vez más hombres ven la vasectomía como una manera de cuidar a su familia y ejercer una paternidad responsable,” señala Sepúlveda Jara.

Gracias a la mayor disponibilidad de información y a la desmitificación del procedimiento, más personas lo están considerando. Iniciativas de ONG como DKT y la participación de influencers han ayudado a que la conversación sobre anticoncepción masculina siga avanzando.

Con los avances médicos que hacen que el procedimiento sea más seguro y accesible, la vasectomía se ha consolidado como una opción efectiva y libre de riesgos para quienes desean cerrar su ciclo reproductivo. Más allá de los prejuicios, es una elección informada que permite a los hombres tomar control de su fertilidad de manera definitiva.