La cirugía para bajar de peso protege la salud del hígado

Un estudio reciente ha demostrado que la cirugía bariátrica para perder peso puede proteger la salud hepática de los pacientes con obesidad y enfermedad del hígado graso.

Los resultados mostraron que los pacientes que se sometieron a cirugía tenían un 72% menos de probabilidades de desarrollar complicaciones graves de la enfermedad hepática, y un 80% menos de riesgo de que su enfermedad avanzara a una etapa potencialmente mortal.

Los investigadores señalaron que la cirugía bariátrica, al promover una pérdida de peso significativa, puede ser una intervención crucial para los pacientes con enfermedad del hígado graso, también conocida como esteatohepatitis asociada a la disfunción metabólica (MASH). Aunque la intervención en el estilo de vida, como cambios en la dieta y ejercicio, es la recomendación estándar, los investigadores destacaron que estos cambios por sí solos rara vez son suficientes para lograr una pérdida de peso significativa y los beneficios metabólicos necesarios para reducir el riesgo de complicaciones hepáticas.

La obesidad y la diabetes son las principales causas de MASH, una de las formas más comunes de enfermedad hepática crónica en los EE. UU. En el estudio, se comparó un grupo de 62 pacientes que se sometieron a cirugía bariátrica con 106 pacientes en un grupo de control que no se sometieron a la cirugía. Después de 15 años, los pacientes que se sometieron a la cirugía perdieron un 27% de su peso, en comparación con el 10% de los que no se sometieron a la cirugía.

Los resultados indicaron que el 21% de los pacientes que se sometieron a cirugía desarrollaron complicaciones graves de la enfermedad hepática, como cicatrices avanzadas, cáncer de hígado, trasplante o muerte, frente al 46% en el grupo de control. Además, solo el 16% del grupo de cirugía progresó a una enfermedad hepática avanzada, frente al 31% en el grupo de control.

Este estudio respalda la cirugía bariátrica como un tratamiento efectivo para influir en la progresión de la cirrosis en ciertos pacientes, y sugiere que los nuevos medicamentos contra la obesidad, como Wegovy y Zepbound, que provocan una pérdida de peso promedio de entre 15% y 20%, podrían tener resultados similares.