El mundo se vuelve borroso: ¿Por qué hay cada vez más problemas oculares?

Cada vez vemos peor y a edades más tempranas. El progreso ha traído muchas ventajas, pero también ha afectado nuestra agudeza visual debido a un estilo de vida en interiores y a una alta dependencia de las pantallas.

El apagón generalizado del lunes pasado, que inutilizó los dispositivos electrónicos, nos mostró una escena más propia de generaciones pasadas: las personas estaban en la calle. Era un recordatorio de cómo solíamos pasar más tiempo al aire libre y realizar actividades que no implicaran mirar una pantalla o un libro, lo cual protege la vista.

Los ojos son uno de los órganos más afectados por el estilo de vida moderno. Enfermedades visuales que antes se asociaban al envejecimiento están aumentando en jóvenes e incluso en niños.

El doctor José Manuel Benítez del Castillo, catedrático de Oftalmología de la Universidad Complutense y presidente de varias sociedades oftalmológicas, explica que, desde un punto de vista evolutivo, los humanos estamos programados para ver de lejos. La visión cercana es más reciente, relacionada con la lectura, que comenzó a popularizarse en el siglo XV. Hoy en día, pasamos horas frente a pantallas de dispositivos electrónicos.

Una de las patologías más comunes es el ojo seco, que provoca sensación de arenilla, escozor y visión borrosa, y está relacionada con el poco parpadeo que se produce al mirar una pantalla. El doctor Benítez señala que las personas frente a las pantallas parpadean menos, lo que reduce la producción de lágrima y provoca sequedad ocular.

El ojo seco afecta hasta el 30% de los jóvenes de entre 18 y 30 años, aunque muchos no han sido diagnosticados. Además, los niños de entre 12 y 15 años ya empiezan a experimentar síntomas debido al uso excesivo de pantallas.

Otra consecuencia de la vida moderna es el aumento de la miopía, una condición que dificulta la visión de lejos y que se está convirtiendo en una epidemia entre los jóvenes. En 2023, la prevalencia de miopía en niños de entre 5 y 7 años en España fue del 20,3%, y en universitarios de entre 17 y 27 años, el porcentaje sube al 62%. Se espera que para 2050, la mitad de la población mundial sea miope.

Además de la miopía, se están viendo más casos de desprendimiento de retina, una patología relacionada con la alta miopía, especialmente en personas jóvenes. La doctora Purificación Mera, especialista en retina, destaca que la cirugía ocular temprana y la mayor prevalencia de miopía aumentan el riesgo de esta condición.

El estrés y la ansiedad también impactan la salud ocular, provocando desde fatiga visual hasta enfermedades más graves, como la coriorretinopatía serosa central o la pérdida temporal de visión.

Para prevenir estos problemas visuales, los expertos recomiendan limitar el uso de pantallas, parpadear con frecuencia, utilizar lágrimas artificiales, y seguir la regla del 20-20-20: cada 20 minutos de trabajo, descansar 20 segundos mirando a 20 pies (aproximadamente 6 metros). También se aconseja mantener una dieta saludable rica en omega-3, vitaminas y hacer ejercicio para proteger la retina.

Dado que algunas patologías oculares son silenciosas, se recomienda realizar una revisión oftalmológica anual para un diagnóstico precoz.