Casi la mitad de los estadounidenses de las zonas rurales se enfrentan a largos viajes para someterse a una cirugía

A medida que el cierre de hospitales rurales continúa en Estados Unidos, un número creciente de personas enfrenta viajes de más de una hora para acceder a atención quirúrgica, según dos estudios recientes.

Para 2020, aproximadamente 99 millones de estadounidenses ya tenían dificultades para encontrar cirugías oportunas, asequibles y de calidad, según datos de la Universidad de Michigan. La situación es particularmente grave en zonas rurales.

"Uno de los principales factores que explican esta realidad es el cierre de más de 150 hospitales rurales en los últimos 14 años, aunque también influyen otros aspectos del sistema de salud", explicó el Dr. Cody Mullens, autor principal de los estudios.

Además de la distancia, los costos de bolsillo de las cirugías han aumentado, incluso para quienes tienen seguro. Aunque la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio redujo la cantidad de personas sin cobertura, el número de asegurados con planes insuficientes ha crecido, en parte debido a los deducibles altos, explicó Mullens, médico residente de cirugía en Michigan Medicine.

Los estudios, publicados en Annals of Surgery y Journal of the American Medical Association (JAMA), analizaron datos entre 2011 y 2020 de fuentes como Medicare, Medicaid y la Asociación Americana de Hospitales.

Los hallazgos revelaron que, para 2020, casi 100 millones de personas no tenían acceso local a cirugías asequibles, con un impacto mayor en comunidades rurales. Se consideró que un paciente tenía "buen acceso quirúrgico" si vivía a menos de una hora de un hospital con al menos tres estrellas en la calificación de calidad de Medicare y podía costear los gastos de la cirugía después del seguro.

Según esta métrica, el 7 % de los pacientes rurales tenía un acceso insuficiente, en comparación con el 2 % de quienes vivían en zonas urbanas.

El estudio de JAMA analizó a pacientes rurales que se sometieron a 16 tipos de cirugía entre 2010 y 2020. Se encontró que, para 2020, el 44 % de ellos debía viajar más de una hora para su procedimiento, en comparación con el 37 % en 2010. En promedio, los pacientes rurales viajaban 55 minutos hasta un centro quirúrgico.

Mullens advirtió que la combinación de distancias largas y costos elevados puede llevar a retrasos en la cirugía, lo que puede agravar las condiciones de los pacientes.

El equipo de investigación explicó que algunas políticas diseñadas para mejorar la calidad de la atención han contribuido involuntariamente a esta situación. Un ejemplo es la "centralización" de cirugías en hospitales de alta calidad, lo que ha reducido la disponibilidad de procedimientos en centros rurales.

Sin embargo, según Mullens, muchas cirugías de bajo riesgo, como la extirpación de la vesícula biliar, la reparación de hernias o los reemplazos articulares, pueden realizarse con seguridad en hospitales más pequeños.

"No es aceptable que tantos pacientes deban viajar distancias tan largas para procedimientos de bajo riesgo que pueden hacerse con alta calidad en hospitales rurales", afirmó.

Para reducir el impacto del tiempo de traslado, los médicos podrían recurrir a la telesalud para algunas consultas prequirúrgicas.

En cuanto a los costos, Mullens recomendó que las personas que anticipen una cirugía elijan cuidadosamente su seguro de salud, evitando planes con deducibles altos y considerando opciones como cuentas de ahorro para la salud o de gastos flexibles para reducir los gastos de bolsillo.