Profeco explica qué es y cómo se fabrica el queso de puerco

El queso de puerco es un alimento cocido y prensado, hecho principalmente de partes carnosas, grasas y cutáneas del cerdo, especialmente de la cabeza. Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), estas partes se salan y se curan con salmuera.

La mezcla incluye ingredientes como cloruro de sodio, nitritos, azúcares, condimentos y conservadores, todos aprobados por la Secretaría de Salud. Después, la carne se enfría a temperaturas entre 0 y 7°C durante un tiempo variable, según el productor.

Aunque las salchichas y los jamones dominan el mercado de carnes frías, el queso de puerco sigue siendo una parte importante de la dieta mexicana. De acuerdo con el Consejo Mexicano de la Carne, el consumo anual promedio de carne en México es de 65 kilogramos por persona, de los cuales 8.6 kilogramos son productos cárnicos procesados. De estos, el 90% corresponde a salchichas y jamones, y el resto incluye tocino, chorizo, longaniza, mortadela y queso de puerco.

El proceso de elaboración del queso de puerco, según Profeco, sigue los siguientes pasos para garantizar la higiene y calidad del producto:

1. Lavado: Las piezas de carne se limpian.

2. Cocción: Se cuecen durante al menos 20 minutos.

3. Separación: Se separan los huesos de la carne y los líquidos.

4. Molienda: La carne se muele para lograr una textura uniforme.

5. Mezcla: Se añaden condimentos y caldos a la carne cocida.

6. Moldeado o embutido: La mezcla se coloca en moldes o fundas, evitando la introducción de aire.

7. Envasado: El producto final se coloca en su envase.

Profeco recomienda moderar el consumo de queso de puerco debido a su alto contenido de sodio, grasas saturadas y azúcares. La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere un límite de ingesta de sodio de menos de 2 gramos diarios, que equivale a 5 gramos de sal. En México, el consumo promedio duplica esta cantidad, lo que incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

El etiquetado frontal es una herramienta útil para identificar productos con altos niveles de sodio, grasas o azúcares. Profeco recuerda que el consumo excesivo de estos nutrientes está relacionado con la hipertensión y otros problemas de salud. Por lo tanto, aunque el queso de puerco puede formar parte de una dieta variada, debe consumirse de forma ocasional y controlada.