Un estudio reciente sugiere que las enfermedades cardíacas podrían contribuir al encogimiento cerebral observado en la demencia.
Según los investigadores, las personas con signos tempranos de problemas cardíacos son más propensas a experimentar cambios cerebrales asociados con la demencia. En particular, aquellos cuyos corazones no bombean sangre de manera eficiente tienden a tener cerebros más pequeños en comparación con las personas con corazones saludables.
El Dr. Frank Wolters, investigador principal del Centro Médico de la Universidad de Erasmus en Róterdam, Países Bajos, comentó que incluso una leve disfunción cardíaca está relacionada con una salud cerebral adversa. Señaló que evaluar a las personas con problemas cardíacos para detectar posibles dificultades de memoria y habilidades cognitivas podría ayudar a identificar el deterioro cognitivo temprano y facilitar intervenciones oportunas.
El estudio analizó datos de siete investigaciones realizadas en Europa y Estados Unidos, que incluyeron casi 11,000 personas. Los resultados mostraron que aquellos con disfunción sistólica moderada a grave, en la que el corazón no puede contraerse y bombear sangre de manera eficiente, tenían volúmenes cerebrales más pequeños en comparación con aquellos con corazones saludables. Asimismo, las personas con disfunción diastólica, en la que el corazón no se relaja adecuadamente entre latidos, mostraron volúmenes cerebrales más pequeños, especialmente en el hipocampo, una área crucial para la memoria.
Incluso los síntomas cardíacos que no indican insuficiencia cardíaca grave se vincularon con una reducción en los volúmenes cerebrales, lo que ha sido relacionado con deterioro cognitivo y demencia.
Los investigadores concluyen que una mejor salud cardíaca se asocia con cerebros más grandes, lo que sugiere que preservar la función cardíaca podría ayudar a mantener la salud cerebral y las habilidades cognitivas durante el envejecimiento. Sin embargo, los expertos destacan la necesidad de realizar más estudios para comprender mejor cómo los problemas cardíacos afectan la salud cerebral.