En las últimas tres décadas, la obesidad ha pasado de ser un problema emergente a convertirse en una crisis de salud pública a nivel global.
Actualmente, más de 2.500 millones de adultos sufren de sobrepeso, y las repercusiones de esta condición, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que causa alrededor de tres millones de muertes al año, están afectando con mayor intensidad a países de ingresos bajos y medios, como México.
América lidera las tasas más altas de obesidad en el mundo, y México se encuentra entre los países más afectados. Datos recientes muestran que, entre 2006 y 2022, mientras la prevalencia del sobrepeso disminuyó un 3 %, la obesidad aumentó un preocupante 21,4 %.
Esta situación pone a millones de mexicanos en riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión y problemas cardiovasculares. Solo la diabetes, estrechamente relacionada con la obesidad, causa más de 110.000 muertes al año en el país.
El consumo de dietas altas en azúcares y grasas, combinado con un estilo de vida sedentario, ha empeorado el problema en un país donde las soluciones son urgentes y complejas.
Un rayo de esperanza: tratamiento con semaglutida
Para hacer frente a esta crisis, México dará un paso importante en abril de 2025 con la introducción de un nuevo tratamiento desarrollado por Novo Nordisk. Este medicamento, basado en semaglutida 2.4 mg, es parte de los análogos del GLP-1, compuestos que han mostrado ser efectivos para reducir el hambre y aumentar la sensación de saciedad. Según estudios clínicos, este tratamiento permite una pérdida de peso promedio del 17,5 %, y en algunos casos excepcionales, hasta un 20 % en un periodo de 68 semanas.
Mike Vivas, director médico senior de Novo Nordisk México, destaca que este avance “es una clara muestra del compromiso de la compañía con las personas que padecen obesidad en el país”. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha aprobado su uso en personas con obesidad o sobrepeso que presenten al menos una comorbilidad.
Obesidad: más allá de un problema alimenticio
La obesidad es una enfermedad multifactorial que va mucho más allá del consumo excesivo de alimentos y la falta de ejercicio. Factores genéticos, ambientales, socioculturales, psicológicos y metabólicos desempeñan un papel esencial, por lo que el tratamiento debe abordar cada uno de estos aspectos. Especialistas como Vivas enfatizan la importancia de un enfoque integral que combine una dieta equilibrada, actividad física regular y seguimiento profesional.
“El tratamiento con semaglutida 2.4 mg debe ser indicado y monitoreado por un médico para asegurar su efectividad y seguridad”, subraya Vivas, recordando que este medicamento es solo una herramienta dentro de un arsenal terapéutico diseñado para mejorar no solo la salud física, sino también la mental y emocional de los pacientes.