Un estudio reciente sugiere que los adolescentes que duermen menos de 7.7 horas por noche tienen un mayor riesgo de desarrollar hipertensión.
Los investigadores también encontraron que aquellos que padecen insomnio y duermen poco tienen cinco veces más probabilidades de presentar presión arterial alta, con valores sistólicos superiores a 140, según datos presentados en una reunión de la Asociación Americana del Corazón (AHA).
La hipertensión en la adolescencia puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas en la adultez, advirtió Julio Fernández-Mendoza, director de medicina conductual del sueño en la Universidad Estatal de Pensilvania. "Es fundamental monitorear la duración del sueño de manera objetiva para identificar a los adolescentes con mayor riesgo de problemas cardiovasculares", señaló.
El estudio incluyó a 421 estudiantes de Pensilvania, quienes informaron sobre sus hábitos de sueño y pasaron una noche en un laboratorio para medir su descanso. Además, se les tomó la presión arterial antes de dormir.
Los resultados indicaron que los adolescentes con insomnio que dormían menos de 7.7 horas tenían un riesgo significativamente mayor de hipertensión. Sin embargo, aquellos que, a pesar del insomnio, lograban dormir lo suficiente no mostraron un aumento en el riesgo.
"Es crucial atender las quejas de los adolescentes sobre problemas de sueño y ayudarlos a mejorar sus hábitos para prevenir enfermedades cardíacas desde una edad temprana", comentó Axel Robinson, coautor del estudio y estudiante de secundaria.
La investigación continúa con el seguimiento de los mismos participantes, ahora adultos jóvenes. Brooke Aggarwal, profesora en la Universidad de Columbia y vocera de la AHA, destacó que establecer buenos hábitos de sueño en la adolescencia puede reducir el riesgo cardiovascular en la adultez.
Los hallazgos son preliminares hasta su publicación en una revista científica revisada por pares.