¿Es cierto o falso que perder peso se vuelve más difícil con el paso de los años?

Ahora, si te has preguntado si es cierto que perder peso es más difícil a medida que pasan los años, aquí está la respuesta.

A todos nos dijeron alguna vez frases como “come todo lo que quieras en tus 20” o “después de los 30, tu metabolismo cambia”. Y, en un mundo gobernado por estándares de belleza inalcanzables incluso para actrices de Hollywood, es comprensible que te hayas angustiado por eso.

Para comenzar este artículo, queremos enfatizar que nadie puede opinar sobre tu cuerpo y que los estándares de belleza deberían ser obsoletos, ya que todas somos diferentes y todos los cuerpos son hermosos. Lo importante es que estés bien, te ames y te cuides.

Bajar de peso es más difícil al pasar los años, ¿cierto o falso?

Existe varios factores que pueden dificultar la pérdida de peso a medida que envejecemos, la mayoría de los cuales están relacionados con nuestro estilo de vida o procesos naturales del cuerpo. Según nuestro cuerpo reacciona de manera diferente a medida que pasa el tiempo y se intenta perder peso.

Según estas son las razones principales.

1. Pérdida de masa muscular

Conforme uno envejece, es posible experimentar una disminución en la masa muscular. Este proceso comienza alrededor de los 30 años y se intensifica con el paso de los años. ¿Por qué es importante el músculo? Porque quema más calorías que la grasa, incluso en reposo.

Incluso el movimiento mínimo ayuda a quemar calorías. Sin embargo, en el caso de los adultos mayores que no pueden moverse debido a problemas de salud como la artritis, lesiones o la sarcopenia, es posible que el cuerpo necesite menos calorías de las que se consumen.

2. Cambios hormonales

Según el Instituto Nacional del Envejecimiento en EE. UU., la menopausia es un proceso hormonal natural que ocurre entre los 45 y 55 años y puede relacionarse con el aumento de peso debido a los estrógenos.

Estas hormonas ayudan a regular el ciclo menstrual. Durante la menopausia, el cuerpo produce menos estrógeno, lo que causa un desequilibrio que puede tener repercusiones en el peso.

Además, afecta al cerebro, los huesos, el hígado, el corazón, la piel y los tejidos corporales, así como a la regulación de los procesos metabólicos, como los niveles de colesterol.

Adicionalmente, los cambios hormonales pueden afectar nuestro estado de ánimo y, en ocasiones, dificultar el seguimiento de ciertas pautas dietéticas.

3. El metabolismo se vuelve más lento

La disminución de masa muscular puede ocasionar un metabolismo más lento, el cual convierte las calorías en energía.

4. Sedentarismo

Estar pegado a la computadora o a la oficina debido a las exigencias laborales también puede llevar a un estilo de vida sedentario en comparación con la juventud.

5. Alimentación

Los malos hábitos alimenticios, debido a la falta de tiempo o una organización deficiente en la dieta, contribuyen a una falta de control sobre lo que consumimos, llevándonos a comer lo "primero que encontramos", sin considerar si es saludable o no.

¿Qué hacer?

No podemos cambiar el pasado ni existe una regla universal para adelgazar; de inicio, tampoco está garantizado que te resulte más difícil perder peso.

Lo que sí podemos hacer es intentar llevar una vida más activa y saludable en cualquier etapa. Esto es de suma importancia.

• Organizar los alimentos a comprar y comer por semana o mes, controlando la ingesta calórica.
• Enfócate en seguir una dieta balanceada, prioriza alimentos saludables y altos en fibra.
• Mantenerte hidratada.
• Hacer ejercicio con pesa para aumentar masa muscular. En general, mantente en movimiento.
• Busca maneras de lidiar con el estrés para no terminar aumentando porciones o comiendo de más.

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