Un estudio reciente publicado en Nature Medicine ha demostrado que un programa de inteligencia artificial (IA) entrenado específicamente para identificar cáncer de ovario mediante imágenes de ultrasonido supera a los médicos humanos en precisión. El programa alcanzó una tasa de precisión superior al 86%, mientras que los expertos humanos lograron poco menos del 83% y los examinadores no expertos alcanzaron cerca del 78%.
El cáncer de ovario, aunque común, a menudo se detecta de manera incidental, y la IA podría ser un apoyo importante, especialmente en casos difíciles de diagnosticar o en áreas con falta de expertos en ecografía, según Elisabeth Epstein, médica del Instituto Karolinska en Suecia.
El estudio involucró más de 17,000 imágenes de ultrasonido de aproximadamente 3,700 pacientes de 20 hospitales en ocho países. La IA fue entrenada para diferenciar entre lesiones ováricas benignas y malignas, y su implementación también redujo la necesidad de derivaciones a expertos. En un entorno simulado, la IA redujo las derivaciones en un 63% y los diagnósticos erróneos en un 18%.
Los investigadores concluyeron que la IA podría mejorar la atención de las pacientes con lesiones ováricas, haciendo los diagnósticos más rápidos y rentables. Sin embargo, señalaron que se requieren más estudios para validar los resultados y evaluar el impacto de la IA en la práctica clínica diaria. Están planificando un ensayo clínico para explorar cómo la IA podría mejorar el manejo de pacientes y reducir los costos de atención médica.
Este tipo de tecnologías, según los investigadores, podría convertirse en una parte integral del sistema de atención sanitaria del futuro, optimizando los recursos y aliviando la carga de los profesionales médicos, siempre y cuando se adapten adecuadamente a diversos entornos clínicos.