La jubilación, que debería ser una etapa para disfrutar de la vida, puede convertirse en un período de desafío emocional, según un estudio publicado en Aging and Mental Health. Los investigadores encontraron que las personas jubiladas tienen más probabilidades de experimentar síntomas depresivos en comparación con quienes continúan trabajando. Este efecto negativo puede agravarse por el consumo excesivo de alcohol.
Principales hallazgos del estudio
- Síntomas depresivos en jubilados: Los jubilados reportaron más signos de depresión que las personas activas laboralmente.
- Consumo de alcohol y depresión: Los atracones de bebida aumentaron significativamente los síntomas depresivos. El consumo excesivo se definió como cinco o más bebidas diarias para hombres, y cuatro o más para mujeres.
- Consumo moderado: Un consumo moderado (1-3 bebidas diarias para mujeres y 1-4 para hombres) estuvo asociado con menos síntomas de depresión en comparación con el consumo excesivo o la abstinencia total.
Factores que complican la jubilación
Los investigadores identificaron varios factores que afectan la salud mental tras el retiro laboral:
- Pérdida de identidad profesional.
- Cambios financieros.
- Alteraciones en las rutinas diarias.
- Menor conexión social.
Además, los adultos mayores procesan el alcohol menos eficientemente y podrían estar tomando medicamentos que interactúan negativamente con el consumo.
Riesgos del consumo de alcohol
Aunque el alcohol puede mejorar temporalmente el estado de ánimo mediante la socialización, tiene riesgos significativos:
- Incrementa la probabilidad de caídas y lesiones.
- Puede generar dependencia y problemas de salud.
- La OMS subraya que no existe una cantidad segura de consumo, ya que incluso niveles bajos están vinculados con enfermedades graves, como el cáncer.
Recomendaciones para afrontar la jubilación
- Evaluaciones regulares: Detectar síntomas de depresión y evaluar el consumo de alcohol en adultos mayores.
- Alternativas saludables: Promover mecanismos de afrontamiento como el ejercicio, la socialización en entornos libres de alcohol y la participación en actividades significativas.
- Educación sobre el alcohol: Sensibilizar sobre los riesgos del consumo, especialmente en personas mayores.
Según Antonia Díaz-Valdés, de la Universidad Mayor en Santiago de Chile, es fundamental ofrecer estrategias saludables para adaptarse a los cambios que conlleva la jubilación y evitar recurrir al alcohol como una solución.