El regreso a clases es una etapa emocionante para los niños, pero también puede significar un aumento en la exposición a gérmenes y enfermedades, lo que puede generar preocupación en los padres. Según el Dr. Donald Brown, médico internista del Hospital Houston Methodist, enfermarse es parte de la vida en comunidad, pero hay formas efectivas de reducir los riesgos.
Las enfermedades más comunes en las aulas incluyen:
- Resfriados comunes: Causados por virus respiratorios, provocan congestión, estornudos y fiebre leve.
- Gastroenteritis viral (gripe estomacal): Causa diarrea, vómitos y malestar abdominal.
- Conjuntivitis: Infección ocular que causa ojos rojos, picazón y secreción.
- Faringitis estreptocócica: Infección bacteriana que causa dolor de garganta intenso.
- Gripe y COVID-19: Siguen siendo preocupantes, especialmente con brotes recientes.
Para prevenir estos contagios, el Dr. Brown sugiere las siguientes medidas:
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Educar a tus hijos sobre los gérmenes: Enséñales a identificar superficies de alto contacto y la importancia de lavarse las manos después de tocarlas.
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Refuerzo de hábitos saludables: Asegúrate de que se laven las manos correctamente, usen pañuelos o el codo para cubrirse al toser y estornudar, y eviten tocarse la cara.
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Fortalecer su sistema inmunológico: Fomenta una dieta equilibrada, actividad física, hidratación, buen descanso y manejo del estrés.
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Mantener las vacunas al día: Asegúrate de que tu hijo tenga todas las vacunas necesarias, incluidas las actualizaciones contra el COVID-19.
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Mantener a tu hijo en casa si está enfermo: Si presenta síntomas como fiebre, vómitos, diarrea o tos excesiva, es importante que no asista a la escuela para evitar propagar enfermedades.
Con estos consejos, puedes ayudar a reducir la exposición de tus hijos a los gérmenes y a mantener un entorno saludable en el hogar.