El queso amarillo, un alimento común en la dieta mexicana, ha sido objeto de controversia tras un estudio de calidad realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), el cual reveló que varias marcas no cumplen con los estándares de calidad esperados.
Los resultados del estudio indican que muchas de estas marcas contienen ingredientes no propios de un queso auténtico, como almidón, grasas vegetales y agua, lo que afecta tanto la calidad del producto como la expectativa del consumidor.
El estudio analizó 40 productos, evaluando aspectos como la información al consumidor y la denominación del producto. Entre las marcas señaladas por Profeco como no cumplir con los estándares de calidad se encuentran:
- Nutri
- FUD
- Caperucita
- Kraft Singles Americano Light
- Zwan Premium Americano Reducido en Grasa
- Biolac Lácteos
- Dutch Farms
- Franja
- El Campanal
Estos productos fueron criticados por incluir ingredientes como grasas vegetales y almidón, que los descalifican como quesos auténticos.
Para evitar comprar queso de baja calidad, Profeco recomienda leer cuidadosamente la lista de ingredientes. Un queso genuino debe contener elementos básicos como leche, sal, cultivos lácticos y cuajo. Si aparecen aditivos como aceites vegetales, colorantes o almidones, es probable que se trate de un queso procesado.
Otros factores a tener en cuenta incluyen la textura y el color. El queso natural tiene una textura firme y puede presentar grietas o una apariencia irregular, mientras que los procesados suelen ser suaves, uniformes y más flexibles. En cuanto al color, los quesos auténticos tienen un tono amarillo tenue o irregular, mientras que los procesados tienden a tener un color amarillo intenso y homogéneo.
Con esta información, los consumidores pueden tomar decisiones más informadas sobre los productos lácteos que eligen y garantizar que lo que consumen sea de calidad.