Commanders construirán su nuevo estadio en sede del RFK

Los Washington Commanders regresarán a su hogar histórico. La organización ha alcanzado un acuerdo con el Distrito de Columbia para construir un nuevo estadio en el mismo lugar donde el equipo vivió su mayor éxito.

Este estadio reemplazará al antiguo Robert F. Kennedy Stadium, que fue la sede del equipo desde 1961 hasta 1996. Se espera un anuncio formal por parte de la alcaldesa Muriel Bowser y el propietario de los Commanders, Josh Harris, este lunes.

Aunque los detalles del acuerdo no han sido revelados, se ha informado que el costo total del proyecto superará los 3,000 millones de dólares. Harris ha expresado su deseo de inaugurar el estadio para el 2030, aunque el equipo tiene un contrato con Maryland para jugar en el Northwest Stadium en Landover hasta 2027, pudiendo seguir allí hasta que se complete el nuevo estadio.

El plan de Bowser incluye un estadio moderno, junto con viviendas, estacionamiento, hoteles y locales comerciales en el terreno de 174 acres, además de una instalación recreativa. La alcaldesa ha manifestado su intención de atraer grandes eventos como el Super Bowl y el Final Four, así como conciertos de alto nivel.

Cualquier financiamiento público para este proyecto debe ser aprobado por el Consejo de D.C., cuyo presidente, Phil Mendelson, ha expresado que no está a favor de usar fondos del tesoro público para financiar el estadio.

Este acuerdo pone fin a un proceso de búsqueda de un nuevo hogar para los Commanders que comenzó hace un año, especialmente después de la compra del equipo por parte de Harris en 2023. Harris, quien creció en Maryland, ha subrayado el significado personal de asistir a partidos en el RFK.

La propuesta avanzó cuando el Congreso aprobó una ley en diciembre que otorga a la ciudad el control del terreno por los próximos 99 años, lo cual fue clave para que se llegara a este acuerdo. Además, Harris y el comisionado de la NFL, Roger Goodell, hicieron esfuerzos en el Capitolio para que se aprobara la ley que permitió la transferencia del terreno, que fue promulgada por el expresidente Joe Biden en enero.

Aunque los Commanders consideraron otras opciones como quedarse en Landover o mudarse a Virginia, finalmente el terreno del RFK se consolidó como la ubicación preferida, gracias al vínculo emocional de la afición con el estadio. Durante su tiempo en el RFK, el equipo jugó cinco Super Bowls y ganó tres, creando una conexión profunda con sus seguidores.