Los astrónomos continúan analizando la órbita del asteroide 2024 YR4, que pasará a unos ocho millones de kilómetros de la Tierra el 17 de diciembre de 2028, lo que permitirá conocer mejor sus características.
Recientemente, el asteroide ha acaparado la atención porque la probabilidad de impacto en 2032 ha aumentado del 1,3% al 1,6%, un fenómeno inusual, ya que lo habitual es que estas cifras disminuyan a medida que se precisan los cálculos orbitales. Sin embargo, 2024 YR4 será prácticamente invisible para los telescopios terrestres entre finales de abril y principios de mayo, lo que hace crucial mejorar su seguimiento antes de esa fecha. En respuesta, astrónomos de todo el mundo están analizando imágenes de 2021 y 2016 para refinar su trayectoria sin necesidad de esperar hasta 2028.
Si para mayo los parámetros orbitales del asteroide siguen por encima del umbral crítico, el SMPAG (Grupo de Planificación de Misiones Espaciales) enviará un informe a la UNOOSA (Oficina de Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Ultraterrestre) con recomendaciones de acción.
Aunque el impacto de un objeto de entre 40 y 90 metros de diámetro no representaría un peligro a nivel continental, sí podría causar la destrucción de ciudades enteras. Según el astrónomo Daniel Bamberger, en caso de colisión, 2024 YR4 impactaría al norte del ecuador, en un área que abarca desde Colombia hasta Myanmar, incluyendo regiones densamente pobladas como Nigeria o India. Sin embargo, estas proyecciones aún son imprecisas y podrían cambiar conforme se obtengan datos más precisos sobre su órbita.