Virus de Oropuche, ¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad ?

El virus Oropuche está ganando relevancia debido al creciente número de casos, tanto que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una alerta epidemiológica por su posible transmisión de madre a hijo.

Descubierto en 1995 en Trinidad y Tobago, este virus ha causado brotes en Brasil, Ecuador, Guyana Francesa, Panamá y Perú. Se transmite a través de la picadura de mosquitos Culex infectados.

La alerta epidemiológica de la OPS abarca áreas donde el virus Oropuche y otros arbovirus circulan habitualmente, con Brasil, específicamente la región de Pernambuco, siendo uno de los sitios más afectados.

En la región de las Américas, el virus ha sido detectado en cinco países, con Brasil encabezando la lista con 6,976 casos. En Brasil también se ha registrado la transmisión de madre a hijo, que resultó en una muerte fetal.

Síntomas del virus Oropuche

La infección por el virus Oropuche puede causar una enfermedad febril aguda similar al dengue y otros arbovirus. Los síntomas incluyen:

• Fiebre: El síntoma más común, que aparece de manera repentina.
• Dolor de cabeza: Cefaleas intensas son habituales.
• Dolores musculares y articulares: Mialgia y artralgia, similares a los del dengue.
• Malestar general: Sensación de debilidad y fatiga.
• Dolor retro-ocular: Dolor detrás de los ojos, que puede ser severo.
• Fotofobia: Sensibilidad a la luz.
• Náuseas y vómitos: Síntomas gastrointestinales presentes en algunos casos.
• Mareos: Sensación de mareo o vértigo.
• Erupción cutánea: Algunos pacientes pueden desarrollar una erupción en la piel.

Curso de la enfermedad

• Fase aguda: Los síntomas aparecen de 4 a 8 días después de la picadura del mosquito infectado y suelen durar entre 5 y 7 días.
• Recuperación: La mayoría de los pacientes se recuperan sin complicaciones graves, aunque en algunos casos puede haber una fase de convalecencia prolongada con fatiga persistente.

Complicaciones

Aunque la mayoría de las infecciones por el virus Oropuche son autolimitadas y no presentan complicaciones graves, en raras ocasiones pueden surgir complicaciones neurológicas como meningitis o encefalitis.