Investigadores japoneses han descubierto una pastilla que podría funcionar tan bien como el tratamiento actual para prevenir los coágulos sanguíneos tras la cirugía de válvula cardíaca, pero con menos visitas médicas.
A diferencia de la warfarina, el tratamiento estándar, el edoxabán no requiere un monitoreo regular de la coagulación sanguínea ni presenta interacciones con otros medicamentos. "El edoxabán podría facilitar la vida de los pacientes que se recuperan de una cirugía de válvula cardíaca", señaló el Dr. Chisato Izumi, líder del estudio en el Centro Nacional Cerebral y Cardiovascular en Japón.
Izumi agregó que este medicamento, al no necesitar análisis de sangre regulares y al ser administrado en dosis fijas, elimina el riesgo de interacciones con alimentos o medicamentos, lo que reduce la carga sobre los pacientes y mejora su calidad de vida, especialmente durante los primeros meses postoperatorios.
El estudio fue presentado por Izumi en la reunión anual de la Asociación Americana del Corazón en Chicago, aunque los resultados aún son preliminares. Edoxabán fue aprobado por la FDA en 2015 para tratar la fibrilación auricular, pero no se había estudiado ampliamente para el tratamiento postoperatorio en cirugía de válvula cardíaca.
En este ensayo, se comparó edoxabán con warfarina en 400 pacientes japoneses que se sometieron a cirugía de reemplazo de válvula cardíaca. Los resultados mostraron que edoxabán fue igualmente efectivo o incluso superior a la warfarina en la prevención de accidentes cerebrovasculares y coágulos. Solo el 0.5% de los pacientes con edoxabán sufrieron un accidente cerebrovascular o embolia, frente al 1.5% en el grupo de warfarina.
Sin embargo, el 4.1% de los pacientes que tomaron edoxabán experimentaron hemorragias importantes, en comparación con el 1% en el grupo de warfarina. Aunque hubo un caso de hemorragia cerebral fatal en el grupo de warfarina, no se registraron hemorragias cerebrales mortales en los pacientes con edoxabán.
Además, los pacientes que tomaron edoxabán no presentaron coágulos en el corazón, mientras que un 1% de los que tomaron warfarina sí los tuvieron. Por otro lado, los pacientes con edoxabán tuvieron una mayor tasa de hemorragia gastrointestinal (2.1% frente a 0%).
Los investigadores sugirieron que edoxabán podría ser una alternativa viable a la warfarina en el tratamiento postoperatorio tras un reemplazo de válvula cardiaca bioprotésica, pero señalaron que se requieren más estudios para identificar qué pacientes son más propensos a sangrar con edoxabán y cómo reducir este riesgo.
El estudio también reconoció que los resultados podrían haberse visto influenciados por el conocimiento de los pacientes y médicos sobre qué medicamento estaban tomando, y que no incluyó a pacientes con válvulas artificiales.