Malas noticias para quienes pasan demasiado tiempo en el sofá: un nuevo estudio indica que hacer ejercicio no solo mejora la condición física, sino que también mantiene el cerebro más alerta.
Investigadores de Finlandia analizaron estudios previos sobre las habilidades de memoria de personas con distintos niveles de actividad física y descubrieron que los atletas tienen una memoria de trabajo significativamente mejor que los sedentarios. Este hallazgo refuerza la idea de que el ejercicio es una de las mejores maneras de potenciar nuestras capacidades cognitivas, especialmente a medida que envejecemos.
El vínculo entre el deporte y la memoria
El estudio, realizado por científicos de la Universidad de Jyväskylä, buscaba entender mejor la relación entre el ejercicio y el rendimiento cognitivo. La memoria de trabajo, que nos permite gestionar pequeñas cantidades de información mientras realizamos tareas, es crucial para nuestras capacidades cognitivas.
Los atletas parecen desarrollar una memoria de trabajo superior, ya que los deportes requieren decisiones rápidas durante los juegos. Sin embargo, hasta ahora no se había hecho un análisis exhaustivo comparando la memoria de trabajo entre atletas y no atletas.
Para llenar ese vacío, los investigadores analizaron 21 estudios con un total de 1,455 participantes, la mayoría de los cuales practicaban deportes como baloncesto, béisbol y esgrima. Los resultados mostraron que, en general, los atletas tenían una ventaja pequeña pero significativa en memoria de trabajo sobre los no atletas. Esta ventaja era aún más evidente cuando se comparaba a los atletas con los sedentarios, es decir, aquellos con poca actividad física.
Los beneficios cognitivos de estar activo
“Nuestros hallazgos indican un vínculo consistente entre la experiencia deportiva y una mejor memoria de trabajo, mientras que los estilos de vida sedentarios se asocian con desventajas en esta área”, afirmaron los autores en el estudio, publicado en la revista Memory este mes.
Aunque estos resultados no prueban una relación directa de causa y efecto, los estudios analizados mostraron un bajo riesgo de sesgo, lo que refuerza su validez. Además, hay abundante evidencia de que el ejercicio en general beneficia la memoria, lo que respalda la importancia de promover estilos de vida activos y practicar deporte.
Un mensaje para todas las edades
Los beneficios del ejercicio no se limitan a los jóvenes. Investigaciones previas han demostrado que las personas mayores que realizan ejercicio regularmente también mejoran su memoria de trabajo y reducen los efectos del envejecimiento en la memoria.
“Estos resultados sugieren los beneficios cognitivos del deporte y destacan la importancia de un estilo de vida activo para mejorar la salud cognitiva”, concluyeron los investigadores.
Así que, si buscas una razón para levantarte del sofá, aquí tienes una: mantener tu cerebro sano y en forma, sin importar la edad.