La diabetes tipo 2 se desarrolla en parte debido a la incapacidad de las células beta del páncreas para responder adecuadamente al azúcar en la sangre. Una nueva investigación sugiere que adoptar una dieta baja en carbohidratos podría corregir esta disfunción, mejorando así la salud de los pacientes.
Barbara Gower, autora principal del estudio de la Universidad de Alabama en Birmingham, afirmó que "las personas con diabetes tipo 2 que siguen una dieta baja en carbohidratos pueden recuperar la función de sus células beta, algo que no se logra con medicamentos". Según Gower, los pacientes con diabetes tipo 2 leve que reducen su ingesta de carbohidratos podrían incluso dejar de depender de medicamentos y disfrutar de una dieta más rica en proteínas y ajustada a sus necesidades energéticas.
El estudio, publicado por la Sociedad Endocrina, destaca que la diabetes tipo 2, la forma más común de la enfermedad, está asociada con un deterioro y pérdida de células beta, responsables de la producción de insulina en el páncreas. El equipo de investigación teorizó que el daño a estas células podría estar relacionado con una ingesta excesiva de alimentos altos en carbohidratos.
En el estudio, 57 adultos fueron asignados a dos dietas: una baja en carbohidratos (9% de carbohidratos y 65% de grasas) y otra alta en carbohidratos (55% de carbohidratos y 20% de grasas). Aquellos que siguieron la dieta baja en carbohidratos mostraron mejoras significativas en la respuesta de sus células beta al azúcar en sangre. Curiosamente, los participantes negros obtuvieron mayores beneficios en comparación con sus pares blancos, aunque las razones detrás de esta diferencia aún no están claras.
Gower concluyó que se necesita más investigación para determinar si una dieta baja en carbohidratos puede restaurar completamente la función de las células beta y llevar a la remisión de la diabetes tipo 2.