Es un problema crítico que necesita ser abordado para mejorar los pronósticos de los pacientes
El sarcoma es una enfermedad poco frecuente que, lamentablemente, se traduce en un diagnóstico tardío en la mayoría de los casos debido al desconocimiento generalizado sobre este tipo de cáncer.
Según Dorian Yarih García Ortega, cirujano oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología (INCan) de la Secretaría de Salud, esta falta de conciencia y conocimiento es un problema crítico que necesita ser abordado para mejorar los pronósticos de los pacientes.
Se divide principalmente en dos categorías: sarcomas de tejidos blandos y sarcomas óseos. Entre los primeros, los tipos más comunes incluyen el liposarcoma, el leiomiosarcoma y el sarcoma pleomórfico indiferenciado. En los sarcomas óseos, destacan el osteosarcoma, el condrosarcoma y el sarcoma de Ewing.
La mayoría de los casos de sarcoma no tienen una causa identificada, aunque existen factores de riesgo genético-hereditarios como el síndrome de Li-Fraumeni, la neurofibromatosis tipo 1 y el retinoblastoma. También, aunque en menor medida, la exposición a radiación y ciertos químicos pueden incrementar el riesgo.
Uno de los síntomas más comunes es la aparición de una protuberancia o bulto en alguna parte del cuerpo, detectado a través de la palpación. En etapas más avanzadas, los pacientes pueden experimentar dolor e inflamación en la zona afectada, así como pérdida de peso y aumento de tamaño de las protuberancias existentes. Es crucial prestar atención al tamaño de estas lesiones, ya que aquellas mayores a cinco centímetros pueden indicar la presencia de un sarcoma y requieren una evaluación inmediata por parte de un especialista en cáncer.
El diagnóstico de sarcoma implica una serie de pruebas de imagen como radiografías, resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y ecografías. También es esencial realizar biopsias para analizar muestras de tejido. Históricamente, el tratamiento del sarcoma era exclusivamente quirúrgico. Sin embargo, en los últimos 15 años, se han desarrollado nuevas terapias, incluyendo quimioterapia, inmunoterapia y terapias dirigidas, que han mejorado significativamente el manejo de esta enfermedad.
El INCan es el principal centro de referencia en México para el tratamiento gratuito del sarcoma. Cuenta con tecnología de punta y personal altamente capacitado, además de desarrollar protocolos de investigación que pueden ser utilizados en casos avanzados donde los tratamientos convencionales han fallado.
En el marco del Día Internacional del Sarcoma, que se conmemora el 13 de julio, el Dr. García Ortega enfatizó la necesidad de sensibilizar tanto a la población como a los tomadores de decisiones y diseñadores de políticas públicas sobre este padecimiento. Es vital incentivar la investigación científica y promover la detección temprana para mejorar los pronósticos de los pacientes.
El sarcoma de Kaposi es otro tipo de sarcoma que a menudo se relaciona incorrectamente con el VIH. Esta enfermedad está asociada con el virus del herpes tipo 8 y, aunque es más común en personas con VIH, no todas las personas con VIH desarrollan sarcoma de Kaposi y viceversa. Este tipo de sarcoma requiere un tratamiento específico, generalmente a través de quimioterapia.
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