El ántrax es una enfermedad infecciosa poco común pero grave, provocada por la bacteria Bacillus anthracis. Generalmente, afecta a animales tanto domésticos como salvajes, y en menor medida a los seres humanos, aunque su impacto puede ser significativo. Esta enfermedad no se transmite de persona a persona, ya que no es contagiosa, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC).
Información básica sobre el ántrax
Existen cuatro formas de infección por ántrax: cutánea (a través de la piel), inhalación (por los pulmones; la más letal), gastrointestinal (por ingestión) y por inyección. Este último tipo se ha reportado con frecuencia entre usuarios de heroína en el norte de Europa, aunque no se ha documentado en EE.UU.
El ántrax ha sido responsable de diversas epidemias a lo largo de la historia, afectando tanto a humanos como a ganado, y fue utilizado como arma biológica durante la Primera Guerra Mundial. Los CDC consideran al ántrax un agente de categoría A, lo que significa que representa una amenaza significativa para la salud pública y requiere planificación para su manejo.
Síntomas del ántrax
De acuerdo con la Clínica Mayo, la forma cutánea del ántrax, aunque es la más común, es también la menos grave. Sus síntomas incluyen:
- Un bulto similar a una picadura de insecto que rápidamente se transforma en una llaga indolora con un centro negro.
- Fiebre y dolor de cabeza ocasionales.
- Hinchazón y dolor en los ganglios linfáticos cercanos.
Los síntomas del ántrax gastrointestinal pueden incluir náuseas, vómitos, dolor abdominal, fiebre, dolor de garganta y diarrea severa, especialmente en etapas avanzadas.
En el caso del ántrax por inhalación, que es la forma más mortal, los síntomas pueden parecerse a los de la gripe durante unos días, y pueden incluir dolor de garganta, fatiga, dolor en el pecho y dificultad para respirar, entre otros.
El ántrax por inyección provoca síntomas como inflamación, shock y fallo orgánico múltiple.
¿Cómo se produce la infección por ántrax?
Las personas pueden infectarse por ántrax cuando las esporas de la bacteria ingresan a su organismo, ya sea a través de heridas en la piel, ingesta de carne contaminada o inhalación de esporas.
Tratamiento del ántrax
El ántrax puede prevenirse y tratarse con antibióticos. Es fundamental buscar atención médica rápidamente, ya que el ántrax por inhalación es el más complicado de tratar y puede ser fatal.
Frecuencia del ántrax
El ántrax es poco común en países desarrollados, pero se registran brotes esporádicos en animales. Es más prevalente en naciones en desarrollo que carecen de programas veterinarios de salud pública que incluyan la vacunación contra el ántrax.
Vacuna contra el ántrax
Los CDC han aprobado una vacuna contra el ántrax, aunque su uso se recomienda solo para grupos de adultos vulnerables.
Brote de ántrax de 2001 en EE.UU.
En 2001, cinco personas murieron y otras 17 se enfermaron durante una serie de ataques con ántrax. Este incidente, conocido como "Amerihrax", involucró el envío de cartas contaminadas a varias agencias de noticias y oficinas gubernamentales. Tras el ataque, miles de personas recibieron antibióticos como medida preventiva.
Ántrax como arma biológica
Los CDC advierten que Bacillus anthracis sería uno de los agentes biológicos más propensos a ser utilizados en un ataque bioterrorista debido a su facilidad de producción y durabilidad en el medio ambiente.