Un estudio reciente realizado por investigadores daneses ha encontrado que una dosis diaria de vitamina B3, en forma de ribósido de nicotinamida, redujo la inflamación en los pulmones de los pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
Este hallazgo es significativo, ya que la inflamación pulmonar en los pacientes con EPOC puede empeorar la función pulmonar y aumentar el riesgo de infecciones respiratorias graves, que son comunes y potencialmente mortales en estos pacientes.
El estudio incluyó a 40 pacientes con EPOC y 20 voluntarios sanos como grupo de control. Los participantes recibieron 2 gramos diarios de ribósido de nicotinamida o un placebo. Después de seis semanas de tratamiento, los pacientes que recibieron la vitamina B3 mostraron una disminución del 53% en los niveles de interleucina 8 (IL-8), un marcador de inflamación. Este efecto aumentó a 63% después de 12 semanas adicionales de tratamiento.
Los investigadores también observaron que los pacientes con EPOC tienen niveles más bajos de una sustancia química llamada NAD (nicotinamida adenina dinucleótido) en la sangre, la cual está asociada con el proceso de envejecimiento celular y el daño en el ADN, comúnmente causado por el tabaquismo. Los niveles de NAD aumentaron con el tratamiento con vitamina B3, lo que también parece ralentizar algunas señales de envejecimiento celular.
Aunque los resultados son prometedores, los investigadores subrayan que se necesitarán más estudios para confirmar estos hallazgos y evaluar los efectos a largo plazo del ribósido de nicotinamida en el tratamiento de la EPOC. Morten Scheibye-Knudsen, uno de los investigadores principales, destacó la importancia de esta investigación para potencialmente desarrollar nuevas opciones terapéuticas para los pacientes con EPOC.
En resumen, este estudio abre la puerta a un posible tratamiento que podría reducir la inflamación pulmonar y mejorar la salud de los pacientes con EPOC, un avance significativo en un área donde las opciones de tratamiento son limitadas.