No todos los bebés prematuros enfrentarán problemas de desarrollo a largo plazo, según un estudio reciente.
El estudio clasifica a los bebés prematuros en tres categorías de riesgo. Aproximadamente uno de cada cinco (el 20%) obtuvo puntuaciones superiores al promedio en pruebas cognitivas estándar, según los investigadores en la edición del 13 de agosto de la revista Child Development.
Un segundo grupo, que representa el 41% de los prematuros, mostró puntuaciones por encima de lo normal en pruebas de memoria, vocabulario y lectura, pero por debajo del promedio en reconocimiento de patrones y memoria de trabajo.
El tercer grupo, que abarca casi el 40% de los prematuros, presentó puntuaciones inferiores a la media en todas las pruebas, con déficits cognitivos y de atención significativos.
"Nuestro estudio desmiente la idea de que todos los niños prematuros presentan déficits cognitivos y conductuales", comentó la investigadora principal, Iris Menu, investigadora postdoctoral de psiquiatría infantil y adolescente en la Facultad de Medicina Grossman de la NYU.
Cada año, aproximadamente 13 millones de bebés nacen prematuramente, y el parto prematuro se ha asociado con un mayor riesgo de TDAH, problemas en el desarrollo social y calificaciones más bajas. Sin embargo, agrupar a los prematuros en una sola categoría complica la personalización de la atención, añadieron los investigadores.
El estudio analizó datos cognitivos y conductuales de casi 1,900 niños prematuros de entre 9 y 11 años. Los niños del primer perfil obtuvieron un promedio de 21% más en las pruebas cognitivas estándar en comparación con los del tercer perfil, y presentaron menos déficits de atención, con solo el 2.5% afectado frente al 10% del tercer perfil.
Además, los niños del primer perfil lograron mejores resultados académicos, con más del 66% alcanzando un promedio de calificaciones de A- o superior, en comparación con alrededor del 61% del segundo perfil y el 32% del tercero.
La investigadora sénior, Moriah Thomason, vicepresidenta de investigación en psiquiatría infantil y adolescente en la Facultad de Medicina Grossman de la NYU, destacó la importancia de una psiquiatría de precisión que reconozca las diferencias individuales. "Nuestro trabajo subraya la complejidad del parto prematuro y puede mejorar la atención personalizada para cada niño".
Los escáneres cerebrales mostraron que los niños del tercer perfil tenían cerebros un 3% más pequeños de promedio entre los 9 y 11 años y conexiones más débiles entre dos redes cerebrales clave: la red de atención dorsal y la red de modo predeterminado. La conexión entre estas redes fue un 11% más débil en los niños del tercer perfil en comparación con el primer perfil.
Este enfoque de perfil puede ayudar a dirigir mejor la educación, la terapia y el tratamiento farmacológico a los bebés prematuros que más lo necesiten. "Pedimos la implementación de intervenciones sociales y estructurales para asegurar que todos los niños nacidos prematuramente reciban una atención equitativa", dijo Menu.
El estudio también reveló que los niños prematuros negros tenían casi cuatro veces más probabilidades de estar en el tercer perfil de rendimiento más bajo.