Fumar marihuana durante el embarazo podría ayudar a calmar las náuseas matutinas, pero también puede perjudicar el desarrollo del niño, advierte un estudio reciente.
Según los investigadores, publicado el 28 de octubre en JAMA Pediatrics, la exposición al cannabis en el útero se asocia con habilidades de pensamiento menos desarrolladas en la infancia temprana, así como con problemas de conducta como dificultad para controlar impulsos, mala atención y comportamientos agresivos.
"Aunque el cannabis es natural, su uso durante el embarazo implica riesgos significativos", advirtió Sarah Keim, investigadora principal del Centro de Salud Bioconductual en el Hospital Pediátrico Nacional de Ohio. “Algunas mujeres podrían recurrir al cannabis para lidiar con problemas comunes del embarazo, como las náuseas, el insomnio o el estrés. Sin embargo, es mejor consultar con un profesional de salud para encontrar alternativas seguras durante el embarazo”.
Para el estudio, los investigadores combinaron varias herramientas de evaluación para rastrear el desarrollo de los niños en edad preescolar. Se encontró que aquellos expuestos al cannabis durante el embarazo tenían más dificultades para controlar sus impulsos, prestar atención y planificar, con base en observaciones de su comportamiento en un entorno de juego en laboratorio. Además, tendían a mostrar una conducta más agresiva.
“Estos resultados no fueron sorprendentes; más bien confirman y amplían las evidencias de investigaciones previas”, indicó Keim en un comunicado. "Con una muestra más contemporánea y diversa, y teniendo en cuenta la mayor potencia del cannabis actual en comparación con décadas anteriores, este estudio valida investigaciones anteriores y respalda las recomendaciones clínicas para evitar el uso de cannabis durante el embarazo".