Pintar, trabajar la madera o escribir: cualquier actividad creativa podría ser tan efectiva como el empleo para mantener una buena salud mental, según una investigación reciente.
"La artesanía y otras actividades artísticas mostraron un impacto significativo en la percepción de las personas de que su vida tiene un propósito", señaló la Dra. Helen Keyes, autora principal del estudio de la Universidad Anglia Ruskin, en Reino Unido.
De hecho, el impacto de la artesanía superó al del empleo, añadió Keyes. "La artesanía no solo nos brinda una sensación de logro, sino que también es una vía importante para la autoexpresión, algo que no siempre ofrece el trabajo".
Este estudio, publicado el 16 de agosto en la revista Frontiers in Public Health, analizó datos de casi 7,200 participantes de la encuesta anual Taking Part, realizada por el Departamento de Cultura, Medios de Comunicación y Deporte del Reino Unido.
A los participantes se les preguntó sobre su participación en actividades culturales, digitales y deportivas, así como sobre sus niveles de soledad y sensaciones de felicidad, ansiedad y satisfacción con la vida, además de si sentían que su vida tenía un propósito, según un comunicado de prensa de la revista.
Más de un tercio (37.4%) de los encuestados informó haber participado en alguna actividad artística o artesanal en el último mes.
Las personas que se dedicaron a actividades creativas mostraron puntuaciones más altas en felicidad, satisfacción con la vida y la sensación de que su vida tenía un propósito, en comparación con aquellas que no se involucraban en estas actividades, encontraron los investigadores.
"Los efectos en el bienestar persistieron incluso después de considerar factores como la situación laboral y el nivel de privación", comentó Keyes. "Parece que la artesanía puede contribuir positivamente a tu bienestar, independientemente de otros aspectos de tu vida".
Curiosamente, dado que muchas artes y manualidades se realizan en solitario, el compromiso con estas actividades no pareció influir en los niveles de soledad de los participantes.
Aunque el estudio solo muestra asociaciones y no puede probar causalidad, Keyes compartió que ella misma es una apasionada de los proyectos de bricolaje, como la pintura y la decoración.
"Es muy satisfactorio ver los resultados de tu trabajo desarrollarse frente a ti", dijo. "Se siente bien concentrarse en una tarea y comprometer la mente de manera creativa".
Keyes sugirió que los legisladores podrían considerar estos hallazgos en sus políticas.
"Los gobiernos y los servicios nacionales de salud podrían financiar y promover la artesanía, o incluso prescribir socialmente estas actividades para poblaciones en riesgo, como parte de un enfoque para promover y prevenir el bienestar y la salud mental", concluyó.