Un estudio reciente muestra que los hombres que reciben tratamiento contra el cáncer de próstata enfrentan un riesgo mucho mayor de complicaciones de por vida. La investigación, publicada el 7 de noviembre en JAMA Oncology, revela que la cirugía para el cáncer de próstata aumenta más de siete veces la probabilidad de sufrir problemas urinarios o sexuales.
Por otro lado, la radioterapia, otra opción de tratamiento común, triplica el riesgo de complicaciones similares o de desarrollar cáncer de vejiga.
Según los investigadores, muchos hombres podrían decidir no realizarse pruebas de detección del cáncer de próstata si comprendieran estos posibles riesgos.
"Este estudio plantea un gran reto para los médicos, que deben informar a sus pacientes sobre estos riesgos incluso antes de comenzar las pruebas de PSA", comentó el Dr. Ian Thompson Jr., urólogo del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio.
La prueba de PSA mide los niveles de antígeno prostático específico en sangre; niveles altos están asociados con un mayor riesgo de cáncer de próstata. En Estados Unidos, alrededor de 30 millones de hombres de entre 55 y 69 años se encuentran en el rango de edad recomendado para hablar sobre esta prueba con su médico.
Tomar una decisión informada sobre la prueba de PSA requiere que los hombres entiendan tanto los beneficios como los riesgos de la detección temprana, según los investigadores.
El estudio analizó datos de más de 29,000 hombres de dos grandes estudios del Instituto Nacional del Cáncer enfocados en la prevención del cáncer de próstata. De estos, más de 3,900 fueron diagnosticados con cáncer de próstata, 655 recibieron cirugía y 1,056 radioterapia, mientras que el resto optó por vigilancia activa debido a la naturaleza de crecimiento lento de este cáncer.
El equipo revisó reclamaciones de Medicare para identificar 10 posibles complicaciones asociadas al tratamiento, como disfunción eréctil, incontinencia y cáncer de vejiga.
Los hombres que se sometieron a cirugía presentaron un riesgo seis veces mayor de desarrollar al menos una complicación en un plazo de 12 años en comparación con quienes no recibieron tratamiento. La radioterapia también mostró un riesgo a 12 años, aunque tres veces menor al de la cirugía.
"Estudios previos sobre las complicaciones del tratamiento del cáncer de próstata han sido limitados en tamaño, seguimiento o en la ausencia de un grupo de control adecuado", explicó Joseph Unger, investigador principal y profesor asociado en el Centro Oncológico Fred Hutch.
Unger añadió que el estudio es único al ofrecer un seguimiento de hasta 12 años, abarcando una amplia gama de complicaciones clave y comparando con un grupo de control representativo de hombres no tratados, algo que estudios anteriores no habían incluido.