El cáncer de mama triple negativo (TNBC, por sus siglas en inglés) sigue siendo uno de los tipos más agresivos y letales de cáncer de mama, representando el 15 % de los casos. Su pronóstico es desfavorable, ya que es altamente resistente a los tratamientos actuales debido a la falta de receptores específicos a los que suelen dirigirse los medicamentos contra el cáncer de mama.
La búsqueda de nuevas formas de combatir las células que desarrollan resistencia a los tratamientos es urgente para controlar este tipo de cáncer. En este sentido, un equipo del Hospital Brigham and Women en Estados Unidos ha propuesto una estrategia innovadora en un estudio publicado en Nature.
Utilizando muestras de pacientes en estudios preclínicos, los investigadores descubrieron que al combinar dos agentes terapéuticos, se podía inducir a las células de TNBC a un estado más tratable.
Según la autora principal del estudio, Karen Cichowski, la combinación de estos agentes puede aprovechar las señales naturales del cuerpo que eliminan las células mamarias después de la lactancia, logrando así destruir estas células tumorales agresivas. Los resultados respaldan el desarrollo de ensayos clínicos para evaluar si esta combinación podría beneficiar a los pacientes con TNBC.
Los agentes utilizados en la investigación son inhibidores de EZH2 y AKT. Cuando se combinan, logran que las células metastásicas de TNBC se diferencien, proceso que facilita su destrucción mediante un mecanismo similar a la involución del tejido mamario, que ocurre cuando este vuelve a su estado anterior a la lactancia.
El equipo también empleó aprendizaje automático para predecir las respuestas de los pacientes, lo que podría ayudar en la preparación de futuros ensayos clínicos. Además, los investigadores tienen la intención de estudiar si combinaciones similares de medicamentos podrían ser efectivas en otros tipos de tumores.