El vapeo podría hacer que los adultos jóvenes sean físicamente más débiles

Se observaron diferencias en la función de los pulmones, los músculos y el corazón

En las pruebas realizadas con bicicletas estáticas, los jóvenes en sus veinte años que habían estado vapeando durante al menos dos años mostraron una capacidad de ejercicio significativamente inferior a la de aquellos que no vapeaban. Las pérdidas en la capacidad de ejercicio fueron comparables a las observadas en personas que habían estado fumando durante el mismo periodo.

Según el Dr. Azmy Faisal, autor principal del estudio de la Universidad Metropolitana de Manchester, los adultos jóvenes que vapeaban encontraron más difícil respirar, experimentaron una mayor fatiga muscular y, en general, estaban en peor forma física que aquellos que no tenían estos hábitos.

Faisal presentó estos hallazgos el domingo en Madrid, durante la reunión anual de la Sociedad Respiratoria Europea (ERS). El estudio refuerza la idea de que vapear no ofrece beneficios claros sobre fumar. "Nuestra investigación sugiere que vapear no es más saludable que fumar", afirmó Faisal.

Desde hace tiempo se sabe que el uso de cigarrillos electrónicos está asociado con inflamación y daño pulmonar, así como cambios perjudiciales en los vasos sanguíneos. Sin embargo, la cuestión de si el vapeo es una alternativa más saludable para los jóvenes fumadores aún está en debate. Faisal enfatizó que los efectos a largo plazo del vapeo en la salud todavía no están claros.

Para investigar esto, el equipo de Manchester reclutó a 60 personas de unos 20 años, todas con función pulmonar normal según las pruebas estándar. De estos, 20 no vapeaban ni fumaban, 20 habían estado vapeando durante al menos dos años y 20 habían fumado durante al menos dos años. Cada participante realizó pruebas de esfuerzo en una bicicleta estática, con la intensidad del ejercicio aumentada hasta alcanzar el máximo.

Se monitorizaron las respuestas cardíacas, pulmonares y musculares, y se evaluó la función arterial mediante análisis de sangre y ecografía. Los resultados mostraron que tanto fumadores como vapeadores se quedaron sin aliento visiblemente antes de alcanzar su capacidad máxima de ejercicio, y sus piernas se fatigaron más rápidamente. Los análisis de sangre indicaron niveles elevados de lactato, lo que sugiere una mayor fatiga muscular.

Los análisis también revelaron un rendimiento reducido de los vasos sanguíneos en los fumadores y vapeadores en comparación con los no fumadores ni vapeadores. Los vapeadores y fumadores tuvieron una capacidad de ejercicio similar, con resultados de 186 vatios y 182 vatios, respectivamente, frente a los 226 vatios promedio de los que no fumaban ni vapeaban.

El consumo de oxígeno también fue menor en los vapeadores y fumadores, con valores de 2,7 litros por minuto, 2,6 litros por minuto y 3 litros por minuto, respectivamente, en comparación con los nunca fumadores ni vapeadores.

Faisal comentó que incluso en un grupo de jóvenes sin aparentes daños pulmonares, se observaron diferencias significativas en la capacidad para manejar el ejercicio entre los que habían estado vapeando o fumando durante al menos dos años.

El Dr. Filippos Filippidis, presidente del Comité de Control del Tabaco de la ERS y profesor de salud pública en el Imperial College de Londres, aunque no participó en el estudio, señaló que los resultados subrayan que el vapeo podría afectar negativamente la capacidad para participar en el ejercicio. "Es importante que las personas que vapean y los responsables de políticas reconozcan estos riesgos y trabajen para evitar que los jóvenes comiencen o continúen con el vapeo", dijo.

Como los hallazgos fueron presentados en una reunión médica, deben considerarse preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por pares.

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