La pandemia de diabetes es un fenómeno real, ya que esta enfermedad se ha convertido en la tercera causa de muerte en México, afectando especialmente a personas mayores de 65 años.
Las estadísticas muestran que su prevalencia ha aumentado más del 28 por ciento desde 2022, y se prevé que siga creciendo, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición. En este contexto, la Secretaría de Salud ha clasificado la diabetes como una emergencia sanitaria y una epidemia silenciosa que impacta a más de 500 mil niños y casi 12 millones de adultos en todo el país.
Hugo Palafox, vicepresidente de Asuntos Científicos de Immunotec, explicó que la diabetes es un padecimiento multifactorial y genético que surge como resultado de hábitos nocivos que incrementan el riesgo de desarrollarla. Si bien no siempre es así, una mala alimentación, el consumo de azúcares añadidos, el exceso de grasas refinadas y la falta de actividad física son factores clave que pueden desencadenar la enfermedad, sobre todo en personas con antecedentes familiares, una situación común en México. Según el especialista, el aumento en los casos, que representan más del 13 por ciento de las muertes en el país, plantea un panorama complicado para la salud de los mexicanos a largo plazo.
¿Cómo prevenir la diabetes?
Con motivo del Día Mundial de la Diabetes, el especialista ofreció varias recomendaciones que se pueden incorporar a la rutina diaria para prevenir esta enfermedad:
-
Duerme adecuadamente: La falta de sueño puede causar molestias y contribuir a enfermedades. No descansar lo suficiente aumenta la resistencia a la insulina y puede alterar el metabolismo de la glucosa. Por ello, es crucial establecer horarios y dormir al menos 7 horas diarias para mejorar el equilibrio hormonal.
-
Aliméntate de forma saludable: Mantener una buena alimentación y moderar el consumo de azúcares es esencial para prevenir la diabetes, ya que los malos hábitos son los principales desencadenantes. Se recomienda consumir proteínas y grasas saludables, mantenerse hidratado y evitar bebidas artificiales. Además, durante un tratamiento reactivo, es importante tomar suplementos dietéticos que fortalezcan el sistema inmune y ayuden a mejorar la visión, aumentar la energía ante la reducción de azúcares y cuidar la piel.
-
Gestiona el estrés: La tensión prolongada puede elevar los niveles de cortisol, lo que a su vez incrementa los niveles de azúcar en sangre, aumentando el riesgo de diabetes. Para evitar que el estrés cotidiano afecte tu salud, se pueden emplear técnicas como la meditación, el yoga, ejercicios de respiración y actividad física.
-
Mantente activo: Caminar en cualquier momento es beneficioso, pero hacerlo después de las comidas puede mejorar la digestión y regular los niveles de glucosa en sangre, ya que es cuando estos suelen alcanzar su punto máximo. Dedicar 10 o 15 minutos a caminar tras el desayuno o la cena puede ser muy útil.
-
Recibe suficiente luz solar: La vitamina D puede ser útil en el tratamiento y prevención de la diabetes. Se ha descubierto que la exposición a la luz natural desempeña un papel importante en la regulación de los niveles de insulina, por lo que niveles bajos de vitamina D pueden estar asociados con un mayor riesgo de diabetes. Antes de exponerte al sol, asegúrate de usar protector solar y no te expongas por períodos prolongados.
Además de mantener buenos hábitos alimenticios y de descanso, se recomienda realizar chequeos anuales para detectar cualquier anomalía.