Un hongo previamente desconocido encontrado en China ha generado preocupación en la comunidad científica debido a su capacidad para causar infecciones en humanos y su resistencia a los medicamentos antifúngicos comunes.
El hongo, llamado Rhodosporidiobolus fluvialis, fue identificado en muestras clínicas de dos pacientes en diferentes hospitales.
Lo alarmante es que este patógeno no solo ha mostrado resistencia a medicamentos antifúngicos de primera línea, sino que también tiene la capacidad de mutar rápidamente a temperaturas elevadas, similares a las del cuerpo humano. ¿Es el cambio climático un factor desencadenante?
Los investigadores sugieren que el calentamiento global podría estar impulsando la evolución de nuevos patógenos fúngicos. Esta hipótesis se basa en que el hongo R. fluvialis se encontró en un contexto de aumento de las temperaturas globales.
Los dos pacientes en los que se encontró el hongo tenían graves condiciones de salud y recibieron tratamiento con medicamentos antifúngicos comunes. Sin embargo, R. fluvialis mostró resistencia a estos tratamientos.
En estudios de laboratorio, se observó que R. fluvialis muta rápidamente a temperaturas corporales, lo que lo hace más agresivo. Además, la exposición a un antifúngico común aceleró aún más este proceso de mutación.
Aunque algunos expertos advierten que no hay que alarmarse prematuramente, el descubrimiento de R. fluvialis subraya la necesidad de vigilancia e investigación continua para comprender mejor la amenaza que representa este nuevo patógeno y desarrollar estrategias efectivas para combatirlo