No hay nada peor que regresar a la rutina y sentirse inflamado. Esto es totalmente normal, pues tu cuerpo después de los drinks, comida y fiesta necesita una pausa.
Si saliste de viaje, seguramente el cambio en tu alimentación fue notorio, el simple hecho de comer en restaurantes y tomar más refresco de lo habitual es suficiente para que al llegar a casa te sientas hinchado. Tal vez no visitaste otros lugares durante estas vacaciones, pero con las cenas, posadas y eventos basta para que la báscula marque unas cuantas cifras de más al inicio de enero. Regresa a tu peso normal con estos cuatro remedios.
- Adiós a la sal por unos días:
Esta es una de los principales agentes que fomentan la retención de líquidos en el organismo, lo que causa esa incómoda sensación de hinchazón en el cuerpo. El problema es que muchas personas ni siquiera notan su consumo excesivo pues hay varios alimentos altos en sodio que se incluyen regularmente en su dieta diaria. Te recomendamos evitar por completo la sal a la hora de cocinar o preparar tus platillos en la mesa al menos por unos días, verás cómo comienzas a sentirte más ligero en muy poco tiempo.
- Agua y vinagre de manzana en ayunas:
Lo primero que haces en la mañana posiblemente sea revisar tu celular, pero, ¿por qué? La respuesta es simple: creaste ese hábito y ahora estás acostumbrado a hacerlo. Tomar un vaso de agua con vinagre de manzana en ayunas ahora también será parte de tu rutina, pues se convertirá en tu más grande aliado para reducir cualquier tipo de hinchazón del cuerpo.
- Jugo detox to go:
El regreso a la rutina se vuelve aún más pesado por el tráfico, entre prisas y pendientes muchas veces parece imposible poder desayunar en casa, por eso mata dos pájaros de un tiro y acude a los jugos diuréticos y depurativos pues además de deshacerse del exceso de líquidos en el organismo resultan como una fuerte fuente de energía. Siéntete con la libertad de crear distintas combinaciones de frutas como piña, apio y cítricos para rendir mejor en el día.
- Suplementos antiinflamatorios:
Magnesio, vitamina D, Omega 3, vitamina B y Quercetina se convertirán en tus más grandes aliados en esta batalla contra la inflamación. Hacer ejercicio, descansar y buscar formas de disminuir el estrés son factores que pueden ayudar a controlar este problema, aunque obtener una ayuda adicional a través de suplementos naturales para así agilizar el proceso es una excelente alternativa.
