En otro recordatorio del impacto psicológico que la pandemia ha tenido en los jóvenes, una nueva investigación muestra que el gasto en servicios de salud mental para niños y adolescentes de EE. UU. ha aumentado drásticamente desde 2020.
Aumentó un 26% para jóvenes de 19 años o menos entre marzo de 2020 y agosto de 2022, según el estudio de RAND Corp. Entre un gran grupo cuyas familias tenían seguro proporcionado por el empleador, el uso de servicios de salud mental aumentó en un 22%.
El uso de la telemedicina para pacientes jóvenes se disparó más de 30 veces en los primeros días de la pandemia y se mantuvo 23 veces más alto de lo normal para agosto de 2022. La atención en persona se situó en el 75% de los niveles pre pandemia para esa fecha.
"Nuestros hallazgos sugieren que la atención de salud mental a través de telemedicina satisfizo una necesidad crítica para pacientes pediátricos tras la aparición de la pandemia de COVID-19 y continúa apoyando una proporción sustancial de la atención de salud mental pediátrica", dijo la autora principal, Mariah Kalmin, investigadora de políticas en RAND, una organización de investigación sin fines de lucro en Santa Mónica, California.
Para el estudio, los investigadores examinaron reclamaciones del administrador de beneficios de salud Castlight Health. El estudio involucró a 1.9 millones de niños y adolescentes con seguro comercial desde enero de 2019 hasta agosto de 2022. Castlight gestiona planes de seguro para unos 200 empleadores en los 50 estados de EE. UU.
Los investigadores buscaron diagnósticos comunes de salud mental pediátrica, incluidos trastornos de ansiedad, trastorno de adaptación, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), trastorno depresivo mayor y trastornos de conducta.
Aunque los servicios de salud mental en persona para niños y adolescentes cayeron un 42% entre marzo y diciembre de 2020, la telemedicina cubrió la brecha. En general, el uso de servicios de salud mental aumentó un 13% durante ese período.
Después de diciembre de 2020, los investigadores observaron un aumento gradual en las tasas de gasto tanto para la atención en persona como para la telemedicina en comparación con la situación antes de la pandemia.
Los hallazgos del estudio fueron publicados en línea el 3 de octubre en la revista JAMA Network Open.
"A medida que aumentan las pruebas de que la telemedicina puede proporcionar tratamiento de salud mental de manera efectiva para niños y jóvenes, estos hallazgos tienen implicaciones importantes para la sostenibilidad de la telemedicina más allá de los efectos de la pandemia de COVID-19", dijo Kalmin en un comunicado de prensa de RAND.
"Las crecientes necesidades de los niños con problemas de salud mental son de particular importancia para los empleadores, tanto por la tensión en los empleados que cuidan a estos niños como por el gasto médico de estos dependientes vulnerables", dijo la coautora del estudio, la Dra. Dena Bravata, asesora científica principal de apree health. "El acceso a la atención para el TDAH, la ansiedad y los trastornos de adaptación en particular es vital para la salud integral de un hogar".
