La demencia es uno de los problemas de salud mas comunes en las personas mayores, si bien es una enfermedad irreversible, existen algunas acciones que se pueden tomar para prevenirla en el futuro, una de estas es mantenerse activo físicamente para mantener sano al cerebro.
De acuerdo a un nuevo estudio publicado en la revista Neurology, la actividad física puede ayudar a disminuir el riesgo de demencia, además de retrasar la progresión de la enfermedad de Parkinson.
Este estudio se basa en la observación de 173 adultos mayores que tenían signos tempranos de demencia y Parkinson y de estos, los científicos surcoreanos encontraron que el 27 por ciento tenía un gen que los predisponía a la enfermedad de Alzheimer.
Al comienzo del estudio, los sujetos fueron sometidos a pruebas cognitivas y dos años más tarde le fueron aplicadas prueba similares. Los especialistas encontraron que las personas que se mantuvieron activas físicamente presentaron menos deterioro cognitivo sin importar la relación con los genes.
Jin-Sun Jun, científico de la Universidad Hallym en Seúl, Corea del Sur y autor principal del estudio dijo que los problemas relacionados con las habilidades de pensamiento y memoria tienen un impacto negativo en la calidad de vida y que las personas que hacen actividad física pueden retrasar o prevenir el deterioro mental.
Mantenerse activo también incluyó actividades como tomar una clase en una universidad, centro comunitario o en línea, además de usar juegos para activar la mente, junto con la realización de caminatas en un parque cercano, sacar a pasear las mascotas o simplemente salir a caminar unas cuadras alrededor de su casa.
