Se estima que hasta 7 de cada 10 padres padece burn out parental, un padecimiento que se manifiesta con agotamiento, ansiedad e irritabilidad
¿Sabes qué es el síndrome de burn out parental? Con frecuencia escuchamos sobre el estrés laboral y sus efectos, pero poco se habla sobre las consecuencias del estrés en los padres durante la etapa de crianza de los hijos. Por ello, te damos 10 consejos de expertos de la Universidad de Harvard para controlarlo.
Cuidar de un hijo puede ser una de las experiencias más maravillosas, sin embargo, también puede ser causa de problemas de salud, como el síndrome de burn out parental, que de acuerdo con el portal especializado Psicología y Mente, afecta a más padres de lo que se cree.
Este problema se disparó con la pandemia e implica un fuerte sufrimiento psicológico y físico, pues la crianza puede desgastar mucho a los padres. El cuidado de los hijos requiere esfuerzo, amor, tiempo y energía que muchas veces nos hacen olvidarnos de nosotros mismos.
Encuestas realizadas en España, señalan que hasta 7 de cada 10 padres pueden sentirse demasiado cansados por el esfuerzo diario de la crianza, lo que muchas veces, deriva en síntomas físicos y emocionales negativos.
Las principales manifestaciones del burn out parental incluyen lo siguiente:
- Agotamiento constante
- Tristeza
- Irritabilidad
- Ansiedad y depresión
- Episodios de violencia
- Trastornos del sueño
- Problemas con la pareja
- Niveles altos de estrés
- Cuidado negligente a los hijos
- Sentimientos de culpa
¿Cómo acabar con el estrés de la crianza? Harvard lo explica
El estrés causado por el cuidado de los hijos puede sumarse al que es causado por el trabajo y las tareas del hogar, dando como resultado un intenso desgaste físico y mental que puede tener consecuencias negativas en la salud y hasta favorecer un distanciamiento emocional del hijo.
Con ese contexto en mente, expertos publicaron en Harvard Health una guía titulada “Manejo del estrés, mejore su bienestar al reducir el estrés y aumentar la resiliencia”, donde aconsejan a los padres algunos hábitos que pueden ayudar a controlar el agotamiento parental. Toma nota:
- Levántate temprano
Esto puede hacer una gran diferencia entre un día muy estresante y uno más relajado. Lo ideal es que te levantes al menos 10 minutos antes que tus hijos para preparar todas sus cosas y que no corran por las prisas.
- Sal a caminar
Ante un episodio de mucho estrés o ansiedad, una de las mejores cosas que te pueden ayudar es salir a dar un paseo tranquilo y corto. Los expertos de Harvard aseguran que bastan 10 minutos de caminata para volver a la calma de forma natural. Si puedes ir a una zona de la naturaleza, como el parte, es mucho mejor.
- Implementa una rutina de sueño
Otra de las recomendaciones de los expertos de Harvard es que todos los días procures levantarte y acostarte siempre a la misma hora, ya que eso te ayudará a tener una rutina de sueño para dormir las horas suficientes cada día y no sufras por los desvelos.
- Cuida el momento antes de dormir
Evita revisar tu celular o ver noticias estresantes, la recomendación es que antes de dormir realices actividades relajantes como una sesión corta de yoga, leer, escuchar música o tejer.
- Reparte las tareas del hogar
En la medida de lo posible, intenta repartir las tareas del hogar, de manera que no sientas que toda la carga la tienes tú. Disminuye tu lista de obligaciones y no te preocupes, no va a pasar nada por no lavar los trastes de inmediato. Toma un descanso y cumple con tus tareas poco a poco.
- Cuida tu alimentación
Aunque no lo creas, lo que comes puede hacer una gran diferencia en tu estado de ánimo. Los especialistas en Harvard sugieren evitar los ultraprocesados, ya que contienen grandes cantidades de azúcares y carbohidratos refinados, ingredientes que se relacionan con más estrés. Come más frutas, verduras, carnes magras, cereales integrales y grasas sanas, como el omega 3.
- Haz listas
Cuando tienes muchos pendientes, puede ser de mucha ayuda hacer listas enumerando los pendientes y tachando lo que ya completaste. Además de que no estarás tan abrumado, te sentirás tranquilo por no olvidar nada.
- Respira
En momentos donde te sientes muy estresado o abrumado, es importante que pongas atención a la respiración y que intentes inhalar y exhalar al menos 10 veces, de forma lenta y controlada. Esto es clave para controlar tus emociones y sentirte más tranquilo en pocos minutos.
- No te olvides de tu familia y amigos
Lo sabemos, la crianza puede ser muy absorbente, pero es importante que te des tiempo de convivir con tus amigos y familiares, ya que así puedes tener momentos de descarga emocional. Incluso puede ser una maravillosa oportunidad de pedir ayuda con algunas tareas para sentirte más aliviado.
Habla con otros padres de familia sobre cómo te sientes, es posible que encuentres otros casos similares al tuyo y que te compartan sus estrategias para reducir el estrés.
- No romantices
Hacer un esfuerzo por controlar el estrés es importante para tu salud, pero tampoco debes obsesionarte con la idea de eliminar por completo las presiones y la tensión de tu vida, ya que es algo prácticamente imposible. Mejor enfócate en llevar a cabo acciones que te ayuden a volver a la calma.
Recuerda que el estrés que no se controla puede contribuir a desarrollar complicaciones de salud, como presión arterial alta, enfermedades cardiacas, obesidad y diabetes. Si no muestras mejoría, recuerda acudir al médico para una asesoría personalizada.
