Las reuniones sociales de diciembre aumentan las chances de consumir más sal y alcohol, dos sustancias no recomendadas para hipertensos.
Es posible que las personas con problemas de presión arterial alta se encuentren pendientes de la organización de las reuniones de Fin de año y de la preparación de las comidas y las bebidas. Si bien esto es muy importante, también es clave medirse la presión arterial con regularidad, en especial en esta época de cambios de alimentación y encuentros festivos.
Según expertos es importante que las personas se tomen unos minutos para reflexionar cuáles son sus números con respecto a la presión arterial y que no se excedan en el consumo de sal y alcohol.
“La comida y la bebida no deben ser el centro de la atención durante las reuniones. Lo importante es disfrutar del encuentro con otras personas, conversar y escuchar con tranquilidad”, señaló el experto. “Hoy sabemos que hay personas que tienen la presión alta pero aún no han accedido al diagnóstico de hipertensión. Además, más de la mitad de las personas que ya saben que tienen hipertensión, no logran controlar su presión arterial a un nivel óptimo. Por eso, es necesario que se hagan controles periódicos con un profesional de la salud”, afirmó.
La hipertensión arterial es el factor de riesgo cardiovascular más frecuente y afecta a 1 de cada 3 personas adultas. Se produce por el aumento, sostenido en el tiempo, de la fuerza que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias. Los más jóvenes también pueden tener hipertensión.
Existen estudios científicos que han demostrado que los problemas cardiovasculares aumentan después desde noviembre y alcanzan un pico en el Año Nuevo, según recordó Angela Brown, directora de una clínica para hipertensión.
Se sabe que la hipertensión es multifactorial porque está determinada e influenciada por muchos factores distintos. La herencia (padres o hermanos hipertensos), la edad (con el paso de los años la posibilidad de ser hipertenso aumenta mucho), la obesidad, el consumo excesivo de sal, el consumo excesivo de alcohol, fumar, el uso de prolongado de algunos medicamentos (corticoides, descongestivos nasales, analgésicos) y la falta de actividad física, son algunos de los factores que aumentan el riesgo de tener presión alta.
Durante estas semanas del último mes del año, algunas personas a menudo ponen la salud en segundo plano. “La temporada festiva es un momento para disfrutar -dijo Brown-. Quieres llegar a las festividades saludable, y también quieres salir de la temporada festiva saludable”. Brown junto a otros especialistas, alertaron sobre los riesgos cardíacos de la temporada de fiestas en una reciente publicación.
- Consejos para cuidar la presión arterial durante las Fiestas:
1- Planificar qué se comerá antes de la reunión:
Antes de ir a las reuniones o de organizarlas en la casa, es conveniente planificar qué tipo de comida se consumirá y cómo se evitará el exceso de sal. “A todos nos gusta una buena fiesta. Pero hay que estar consciente de lo que comes, especialmente si se tiene presión arterial alta”, advirtió Brown.
2- Usar los aderezos de la ensalada con cuidado:
Una bandeja con verduras puede ser un buen lugar para llenar con algo saludable. Pero hay que tener cuidado con el aderezo y usar solo un poquito. “Muchas personas piensan, ‘Bueno, estoy comiendo verduras, así que no corro peligro.’ Pero cargan el plato con más aderezo que verduras”, señaló Brown.
Cuando llegue el momento de la comida principal, solo hay que comer cuando se tenga saciedad. No es bueno excederse con los postres.
3- Restringir el consumo de sal:
Limitar el sodio en esta época del año es difícil, pero siempre es importante. Porque el exceso de sodio en el torrente sanguíneo arrastra agua al interior de los vasos sanguíneos. Eso eleva la presión arterial de la persona. Una de las fuentes es la sal de mesa, pero la mayor parte del sodio en la dieta proviene de los alimentos procesados.
4- Cuanto menos se usa la sal, el cuerpo se acostumbra:
Es recomendable no agregar sal de mesa a las comidas cuando se sirven en la mesa o directamente cuando se las está cocinando. “Es clave intentar no excederse en el consumo de comidas con sal y de bebidas con alcohol si una persona tiene hipertensión”, subrayó. En el caso del cóctel con margarita, se debe considerar que tiene alcohol y sal en los bordes.
Hay buenas noticias para las personas que tratan de adaptarse a una dieta baja en sodio. Cuando se usa menos sal, el cuerpo se acostumbra más. Después de algunas semanas, no se necesita tanta sal para conseguir el mismo sabor.
5- Evitar la automedicación:
A veces las personas se auto medican y toman fármacos que pueden elevar la presión arterial como efecto secundario, como los descongestivos. Es mejor hacer la consulta a un profesional de la salud y evitar la automedicación.
Si las personas ya han recibido la indicación de un tratamiento para la hipertensión, se debe seguir el esquema de administración recomendado. Como los días de diciembre pueden alterar las rutinas, se puede usar un organizador de píldoras y fijar una alarma.
6- Divertirse sin estrés:
“Aunque las festividades traen mucha diversión, también traen estrés para las personas”. Las hormonas relacionadas con el estrés han sido vinculadas a un mayor riesgo de presión arterial alta. Ese nivel de estrés también puede contribuir a la depresión, que a su vez también ha sido asociada con la presión arterial alta.
Frente al estrés y a la depresión, es importante no responder comiendo en exceso o abusando del alcohol. Porque esa reacción solo agrava el problema. La actividad física, como la caminata rápida, y las técnicas de meditación y respiración pueden ayudar a reducir el estrés de fin de año.
7- Conocer los números de la presión arterial:
“Los valores normales de presión arterial corresponden a presiones entre 120 de máxima y 80 de mínima. Son los niveles ideales. Se habla de hipertensión cuando los valores están por encima de 140/90 mmHg”, comentó. En casos de jóvenes con padres o abuelos con hipertensión, deberían hacer un chequeo de la presión arterial. Porque podrían tener hipertensión sin saberlo ya que la enfermedad no da síntomas.
Si una persona tiene un nivel de presión entre 130 y 140 y entre 80 y 90, se la considera como “presión arterial limítrofe”. La presión es extremadamente variable. Por eso, se necesitan de varias mediciones para sacar un promedio. Ese promedio debería estar cercano a 130/80.
