La Roma sigue en racha bajo la dirección de Claudio Ranieri y consiguió una victoria clave en Parma (0-1) que mantiene vivas sus aspiraciones europeas.
Con este triunfo, el equipo acumula nueve jornadas sin perder en la Serie A y, aunque sigue en la novena posición, se acerca a solo cinco puntos de la Fiorentina, que ocupa el sexto lugar y cayó ante el Como de Cesc Fàbregas (1-2). Un panorama impensable tras su difícil inicio de temporada.
Después de empatar 1-1 contra el Porto en el playoff de la Europa League, la Roma se prepara para definir la eliminatoria en casa el jueves. Por ello, Ranieri optó por rotaciones en su alineación.
Sin Dybala y con cambios en el once
La ausencia de Paulo Dybala por lesión llevó a Ranieri a realizar ajustes en el equipo, dejando en el banquillo a figuras como Artem Dovbyk, Angeliño y Lorenzo Pellegrini. En su lugar, dieron el salto al once titular dos refuerzos invernales: Luca Gourna-Douath, que repetía titularidad, y Anass Salah-Eddine, quien debutaba.
Aunque el Parma tuvo una ocasión clara con un remate de Ange Bonny que pasó cerca del poste, la Roma controló el partido, aunque sin generar grandes oportunidades hasta el minuto 29, cuando llegó la acción determinante del encuentro.
La jugada que definió el partido
Eidor Shomurodov filtró un pase al espacio para Matías Soulé, quien fue derribado por Giovanni Leoni. El árbitro señaló inicialmente penalti y amonestó al defensor del Parma, pero, tras revisar el VAR, corrigió la decisión: marcó la falta fuera del área y expulsó a Leoni por ser el último hombre.
El cambio de decisión no afectó el desenlace, ya que Soulé convirtió magistralmente el tiro libre con un disparo preciso que golpeó el poste antes de entrar, recordando a muchos el famoso gol de Diego Maradona en un Nápoles-Juventus de 1985.
El tanto de Soulé resultó decisivo y dejó al Parma sumido en la zona de descenso, con solo dos empates en sus últimas siete jornadas.
Suzuki evitó una goleada
Con un jugador más en el campo, la Roma buscó ampliar la ventaja, pero el portero Zion Suzuki mantuvo con vida al Parma con una doble intervención espectacular. Primero, desvió un disparo de Soulé y, en el rebote, reaccionó rápidamente para detener sobre la línea el intento de Salah-Eddine.
Suzuki volvió a lucirse al evitar otro gol con una gran parada a un remate ajustado de Pellegrini. A pesar de la insistencia romana, el Parma, agotado por la inferioridad numérica, logró evitar un marcador más abultado.
Con este resultado, la Roma sumó su tercera victoria consecutiva como visitante, algo que no lograba desde hacía nueve meses. Antes había vencido a Udinese (1-2) con dos penaltis y a Venezia (0-1) también desde los once metros.