Trump revive Alcatraz: cárcel icónica será “símbolo de justicia”

Donald Trump anunció la reapertura de Alcatraz como prisión federal para criminales peligrosos, desatando reacciones políticas y dudas sobre su viabilidad económica.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo 5 de mayo a través de Truth Social que ha ordenado la reapertura y ampliación de la prisión de Alcatraz, para albergar a los “delincuentes más despiadados y violentos”, como símbolo de su política de mano dura contra el crimen.

La icónica prisión federal Alcatraz, cerrada en 1963 y actualmente convertida en sitio turístico, podría volver a operar como centro penitenciario tras un anuncio del presidente Donald Trump, quien afirmó haber instruido a la Oficina de Prisiones, el Departamento de Justicia, el FBI y Seguridad Nacional para reactivar el recinto.

“Durante demasiado tiempo EE.UU. ha estado plagada de delincuentes viciosos, violentos y reincidentes”, escribió Trump. Según el mandatario, Alcatraz —también conocida como La Roca— funcionaría como “un símbolo de la ley, el orden y la justicia”.

El plan contempla una expansión sustancial del centro penitenciario, ubicado en una isla frente a San Francisco, para albergar exclusivamente a los criminales de mayor peligrosidad del país.

La medida forma parte de un endurecimiento en las políticas de seguridad impulsadas por Trump, quien ha propuesto incluso enviar delincuentes estadounidenses a prisiones extranjeras, como ya ocurrió en marzo con 200 presuntos pandilleros venezolanos enviados a El Salvador.

Críticas: líderes demócratas califican el plan de “irreal”

La propuesta de reabrir Alcatraz generó fuertes reacciones en el ámbito político. Nancy Pelosi, expresidenta de la Cámara de Representantes y representante demócrata de California, consideró que el anuncio “no es serio”.

El senador estatal Scott Wiener, también demócrata y representante de San Francisco, fue más tajante: calificó la idea como “profundamente desquiciada” y un “ataque al Estado de derecho”.

Expertos también cuestionan la viabilidad económica del proyecto. El profesor Gabriel Jack Chin, de la Facultad de Derecho Davis en la Universidad de California, señaló que reactivar Alcatraz sería extremadamente costoso.

“Su funcionamiento era casi tres veces más caro que cualquier otra prisión federal”, explicó Chin, citando la ubicación insular como una de las principales dificultades logísticas y financieras.

¿Es necesaria una nueva prisión federal?

Según datos oficiales, el sistema penitenciario federal ha disminuido su población en un 25% desde su punto máximo, lo que implica que actualmente existen muchas camas vacías en cárceles operativas.

Por esta razón, expertos como Chin ponen en duda la necesidad de construir o reabrir un centro penitenciario adicional, por más simbólico que sea.

Alcatraz cerró en 1963 precisamente debido a su alto costo operativo. Sin embargo, conserva una fuerte carga simbólica por su historia como prisión de máxima seguridad.

Entre sus prisioneros más notorios se encuentran Al Capone, Mickey Cohen y George “Machine Gun” Kelly. También fue inmortalizada por películas como Birdman of Alcatraz (1962) y La Roca (1996), con Sean Connery y Nicolas Cage.

Política, simbolismo y turismo en conflicto

La reapertura de Alcatraz como prisión podría impactar su estatus actual como atracción turística, que recibe más de 1.5 millones de visitantes al año, según cifras del Servicio de Parques Nacionales.

En su mensaje, Trump no ofreció detalles logísticos sobre cuándo ni cómo se realizaría la reconstrucción, ni el presupuesto estimado para el proyecto.

La propuesta refuerza su estrategia de “mano dura” como mensaje electoral, en momentos en que busca fortalecer su imagen de líder implacable frente al crimen.

Sin embargo, la falta de consenso político, el alto costo estimado y la duda sobre su necesidad operativa plantean desafíos significativos para que la medida pase del discurso a la acción concreta.

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