Un doblete de Lucas Stassin le dio una victoria crucial al Saint-Étienne en el Derbi del Ródano ante el Olympique Lyon (2-1), en un partido que se vio empañado por incidentes en las gradas que provocaron la interrupción del encuentro durante veinte minutos, después de que uno de los jueces de línea fuera golpeado por un objeto lanzado desde la tribuna.
Este partido, correspondiente a la trigésima jornada de la Ligue 1, refuerza las esperanzas de salvación del Saint-Étienne y complica las opciones de clasificación a la Champions del Lyon. El árbitro François Letexier suspendió momentáneamente el juego poco antes del descanso, después de que el juez de línea Mehdi Rahmouni fuera alcanzado por una moneda lanzada desde el público en el estadio Geoffroy-Guichard. En ese momento, el Saint-Étienne ganaba 1-0 gracias a un gol temprano de Stassin. Tras deliberaciones con las autoridades deportivas, el partido se reanudó veinte minutos después para completar el tiempo añadido de la primera mitad.
En la segunda parte, el Saint-Étienne amplió su ventaja en el minuto 67, con otro gol de Stassin, quien firmó su doblete y desató la alegría en las gradas, ahora más tranquilas tras los disturbios iniciales. El Lyon reaccionó tarde y logró acortar distancias por medio de Tanner Tessmann, pero no logró igualar el marcador, lo que representa un golpe importante a sus aspiraciones europeas.
Con este resultado, el Saint-Étienne iguala en puntos al Le Havre, que está en zona de promoción, y se coloca a solo tres unidades del Angers, que ocupa la plaza de salvación directa. Por su parte, el Lyon cae al sexto lugar de la tabla, fuera de los puestos de Champions League, aunque sigue a solo dos puntos del Lille, actualmente en el cuarto puesto.