Rezago educativo limita la competitividad industrial en Piedras Negras
El crecimiento industrial de Piedras Negras avanza más rápido que su capital humano. Mientras la frontera atrae inversiones millonarias y demanda técnicos e ingenieros especializados, la mayoría de la población adulta mantiene niveles educativos básicos. Nuevos datos 2020–2025 confirman que la brecha educativa sigue frenando salarios, competitividad y movilidad económica.
Un crecimiento económico que no encuentra suficiente talento
El rezago educativo persiste como un obstáculo central en Piedras Negras. Aunque la secundaria sigue siendo el nivel más frecuente entre adultos —con 47,500 personas (37.9%), según el Censo 2020—, la actualización de cifras estatales 2025 muestra que más del 75% de la población mayor de 15 años continúa sin estudios superiores. El avance ha sido mínimo.
La preparatoria comprende alrededor del 20% de los mayores de 15 años, mientras que la primaria abarca 17.8%. Estos niveles educativos se reflejan en un mercado laboral dominado por empleos operativos y con baja calificación, justo cuando la región vive un auge industrial sin precedentes.
Coahuila reportó en 2025 1,177 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa, impulsada por la manufactura avanzada y el nearshoring. Sin embargo, el talento especializado no crece al mismo ritmo: sólo el 40.6% de la población en edad universitaria accede a estudios superiores, y apenas 4.6% cursa carreras en Tecnologías de la Información, mientras 1.26% estudia Ciencias Naturales. En contraste, más del 40% de los estudiantes opta por carreras administrativas o sociales, alejadas de la demanda real de la industria.
Este desajuste amenaza la competitividad regional: la industria requiere ingenieros en software, técnicos en automatización, especialistas en energías limpias y perfiles STEM que hoy escasean.
Brecha de género y acciones para revertir el rezago
La desigualdad educativa también golpea más fuerte a las mujeres. Estudios recientes confirman que gran parte de ellas permanece en niveles básicos, lo que reduce su acceso a empleos formales y a mejores salarios. Esta disparidad sigue limitando la equidad económica familiar en la región.
Frente a este panorama, especialistas piden reorientar el sistema educativo. El IMCO impulsa fortalecer carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) y reconfigurar planes de estudio hacia la industria local. A la par, el IEEA (Instituto Estatal de Educación para Adultos Coahuila) intensifica estrategias de alfabetización: en 2025 estima que más de 20 mil adultos de Piedras Negras obtendrán certificados de primaria o secundaria. A nivel estatal, el analfabetismo se mantiene en 1.2%, aunque persisten 31 mil personas sin saber leer ni escribir; en Piedras Negras representan cerca de 1,800 ciudadanos.
Convenios recientes entre el Tecnológico local y el IEEA permiten identificar adultos en rezago y canalizarlos a educación básica y media superior. Además, programas de becas, apoyos económicos y bachilleratos abiertos buscan asegurar que más del 90% de los egresados de secundaria continúe estudiando.
El reto es claro: alinear la formación académica con la economía que ya está aquí. Si la frontera norte no cierra la brecha educativa a tiempo, advierten expertos, el desarrollo industrial seguirá avanzando… pero sin suficientes profesionistas locales para aprovecharlo.
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