Pumas sufrió con los goles de John Kennedy: Cayeron ante el Pachuca

Excelente juego en donde el Pachuca logra vencer a Pumas 2-1.

Pachuca ganó (2-1) y pasó por encima de unos tristes Pumas sin ataque y sin idea defensiva que les terminó causando su segunda derrota en el torneo. Y los Tuzos volvieron a ganar después de dos juegos de no hacerlo.

Contra Pachuca, Pumas sufrió una barbaridad, y el rostro del arquero Pablo Lara lo mostraba claramente, pues los errores y carencias defensivas fueron evidenciadas por los Tuzos, a quienes los felinos no encontraban como quitarse de encima.

La ausencia de los dos defensas titulares (Nathan y Magallán) y el hecho de haber cambiado la linea de cinco, a dejar cuatro hombres en la zaga, y sumándole el talento del ataque de Pachuca, hizo que Pumas la pasará mal en el Estadio Hidalgo y pagara caro sus errores.

Pronto en el partido (9′), Pumas se llevó tremendo susto cuando después de que entre Idrissi y Bryan llevarán el juego hasta el lado felino, se mandó un centro al área, la pelota rebotó, le quedó a ‘Ponchito’, quien empujó y anotó lo que parecía el primer gol, pero la jugada fue revisada en el VAR, y la árbitra Katia Itzel García informó que no era gol válido.

Pero para el minuto 16 la mala fortuna le llegó a Pumas y ya no los abandonó. El arquero Carlos Moreno despejó y fue perfecto porque la pelota le quedó a Kennedy del otro lado del campo, y ante la mala salida del joven Pablo Lara y de paso la marca errónea de los defensas, el marco de Pumas quedó abierto, y el brasileño no perdonó. Los Tuzos ya iban adelante, y el arquero felino no pudo evitar las lágrimas.

Pumas sufrió con sus carencias en la defensiva
Las carencias defensivas de Pumas eran evidentes. Una vez tras otra, el ataque tuzo llegaba hasta el fondo del área auriazul e incluso en una de esas, Salomón Rondón condujo el balón. En el camino, se quitó de encima a Pablo Bennevendo, quien acabó casi en el suelo y con la cadera ‘rendida’ con el recorte del venezolano que por suerte para Universidad, no alcanzó a disparar.

Cuando lo mejor que podía pasarle a Universidad Nacional era que terminara la primera mitad, Rondón protegió la pelota y la llevó hasta el área. A pesar de la marca de tres felinos, que no pudieron con el venezolano, centró a donde estaba Kennedy, quien sólo empujó. El brasileño había consumado su doblete.

Pasó el tiempo y mientras Idrissi y Rondón hacían lo que querían con la defensa universitaria, Guillermo Martínez no tuvo el balón casi nunca. Y al final Pablo Lara recuperó la confianza y fue determinante para que la derrota felina no fuera mayor. Aunque de último minuto (93′) un zapatazo de Ignacio Pussetto le dio un gol a Universidad, ya no sirvió de nada porque se consumó la derrota en un juego que tienen que olvidar de inmediato porque delante tienen el partido más relevante del torneo para ellos y su gente. Es ante América, rival contra el que no pueden perder, porque de hacerlo, la hostilidad de la afición auriazul podría ser insostenible.

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