'¡Estamos en la Luna!': Blue Ghost hace historia con su alunizaje vertical
La sonda espacial Blue Ghost aterrizó con éxito en la Luna, marcando un hito en la exploración espacial privada y avanzando el programa Artemis de la NASA.
La sonda espacial Blue Ghost, desarrollada por Firefly Aerospace, aterrizó este domingo en la Luna tras un viaje de seis semanas, convirtiéndose en la segunda misión privada en lograrlo y la primera en alunizar en vertical. La misión, parte del programa Artemis de la NASA, desplegará diez instrumentos para estudiar el subsuelo, la superficie y la atmósfera lunar, allanando el camino para el regreso de humanos al satélite a finales de esta década.
La sonda Blue Ghost aterrizó con éxito en Mare Crisium, en la cara visible de la Luna, tras completar una quema de inserción de órbita de descenso controlada. "Alunizaje perfecto, llegamos a la Luna", exclamó un ingeniero desde el control de la misión en Austin, Texas, mientras el equipo celebraba el hito. Este logro posiciona a Firefly Aerospace como la segunda empresa privada en alunizar, después de la misión israelí Beresheet en 2019, y la primera en hacerlo en vertical.
La misión lleva a bordo diez instrumentos científicos de la NASA diseñados para analizar el regolito lunar, las características geofísicas y la interacción entre el viento solar y la magnetosfera terrestre. Entre los experimentos destacados se encuentra el Lunar GNSS Receiver Experiment (LuGRE), que ya logró rastrear señales de navegación por satélite desde una distancia récord de 400.000 kilómetros. Estos datos serán cruciales para futuras misiones tripuladas y la exploración del espacio profundo.
El éxito de Blue Ghost representa un paso significativo para el programa Artemis, que busca establecer una presencia humana permanente en la Luna. Jason Kim, presidente ejecutivo de Firefly Aerospace, confirmó que la nave está "estable y en vertical", superando los desafíos técnicos de misiones anteriores. Nicky Fox, administradora asociada de la NASA, celebró el logro: "¡Estamos en la Luna!".
La misión, apodada "Ghost Riders in the Sky", es un ejemplo de la colaboración entre la NASA y la industria privada para reducir costos y acelerar la exploración espacial. Firefly Aerospace ha demostrado que las empresas privadas pueden desempeñar un papel crucial en la conquista del espacio, apoyando objetivos ambiciosos como el regreso de astronautas a la Luna.
En los próximos días, los instrumentos de Blue Ghost comenzarán a recopilar datos valiosos sobre el entorno lunar. Esta información será fundamental para diseñar misiones futuras y garantizar la seguridad de los astronautas que viajen a la Luna.
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