El caso Blanco y las rupturas en Morena

El futuro del exgobernador de Morelos y actual diputado federal, Cuauhtémoc Blanco, está en manos de las mujeres de Morena, pero mientras las legisladoras del partido se organizan, incluso con la oposición, para evitar que se deseche su solicitud de desafuero, en lo más alto del oficialismo surge una directriz para enterrar el asunto, tal cual ocurrió la semana pasada con la Sección Instructora.

Poderosos interlocutores han tirado línea a los liderazgos de la bancada morenista en San Lázaro para dar carpetazo al juicio de procedencia, no sólo porque efectivamente está mal integrada la carpeta contra Blanco, sino porque, más allá de las denuncias de la presunta víctima, se le estaría dando la razón al odiado exfiscal Uriel Carmona, lo que es inconcebible para Morena y para el gobierno de Claudia Sheinbaum.

Solo así se explica que al diputado Hugo Eric Flores, otrora dirigente del PES y adversario de Blanco, haya acatado la instrucción como presidente de la Sección Instructora, cuando en el pasado él mismo había prometido castigar las presuntas corruptelas del exgobernador al que impulsó a sus principales puestos políticos con su plataforma partidista.

La solicitud de procedencia de desafuero contra Blanco va a votarse este martes en el Pleno de la Cámara de Diputados. Se requiere la mayoría simple para que se apruebe, es decir los 251 votos de todas las mujeres que ocupan un escaño, lo cual se ve muy complicado.

La vicecoordinadora de Morena en la Cámara Baja, Gabriela Jiménez, es quien encabeza a ese grupo de mujeres parlamentarias que abiertamente han manifestado su deseo de que la solicitud de desafuero sea nuevamente analizada y concedida, para que en breve el exgobernador pueda enfrentar a la justicia como cualquier ciudadano.

No obstante, trascendió que Jiménez estaría por dejar la vicecoordinación que ocupa en la Cámara Baja. Dos temas la tendrían con un pie y medio fuera: primero, por buscar alianzas con la oposición, como lo hizo el pasado para intentar obtener los votos de la reforma contra el nepotismo, ofreciendo que los hijos del expresidente López Obrador tuvieran candados para buscar un puesto popular, igual que ahora con el tema de Cuauhtémoc Blanco; y segundo, porque presuntamente mantiene su intención de crear un nuevo partido con su asociación civil “Que siga la democracia”.

El hecho es que tal escenario se ve probable para este mismo martes, aunque se desconoce si Jiménez aceptó el exhorto de renunciar al cargo que ocupa en la bancada de Morena.

Quien ya suena para sustituirla es Marina Vitela, exaspirante al gobierno de Durango, quien tiene buena relación con los dos grupos de Morena que se han formado en la Cámara Baja: el que encabeza Ricardo Monreal con Pedro Haces, Arturo Ávila y otros diputados y diputadas; y el que lidera Alfonso Ramírez Cuéllar, donde se encontraba también Gaby Jiménez.

Y para intentar zanjar la improcedencia del desafuero de Blanco, la Comisión de Igualdad de Género, que preside la diputada Anais Miriam Burgos Hernández, solicitará a la Fiscalía de Morelos, ahora encabezada por Edgar Maldonado, a que reponga el proceso y presente una carpeta debidamente integrada para que se pueda volver a revisar y votar.

Aunque quizá la mayor preocupación que se tiene sobre el tema de Cuauhtémoc Blanco no tiene que ver con la violencia contra las mujeres, sino con los cientos de millones de pesos que habría desviado del erario, según las denuncias de la actual gobernadora morenista del estado, Margarita González, y por sus posibles relaciones con el crimen organizado; todas estas acusaciones también serían juzgadas en caso de que perdiera la protección constitucional.

comentar nota

Noticias del tema