Culebras en la ciudad: altas temperaturas y limpieza del río las desplazan
El problema suele surgir cuando las personas intentan matarlas o acercarse a ellas imprudentemente al confundirlas con especies venenosas.
Ante los recientes avistamientos de serpientes en diferentes puntos de Monclova, el director de Protección Civil, Pedro Alvarado, hizo un llamado urgente a la población para actuar con precaución y responsabilidad frente a estos reptiles, y sobre todo, a no hacerles daño.
Durante los últimos días se han reportado cuatro casos de presencia de serpientes en zonas cercanas a áreas habitacionales, lo que ha generado preocupación entre vecinos. Sin embargo, las autoridades han enfatizado que la mayoría de estas serpientes no representan un peligro real para las personas, siempre y cuando no se les moleste.
“Estas especies no atacan si no se sienten amenazadas. Muchas de ellas están protegidas por la ley, y deben ser respetadas como parte importante del ecosistema”, explicó Alvarado.
La culebra índigo: especie protegida y no venenosa Uno de los ejemplares identificados en la zona es la culebra índigo, también conocida popularmente como víbora pollera. Este reptil es una especie no venenosa, de gran tamaño, y se encuentra protegida en México bajo la NOM-059. También está resguardada por instituciones como la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Aunque su aspecto puede causar alarma, ya que su tamaño puede superar los dos metros y presenta un color oscuro e intimidante, no representa ningún riesgo para la vida humana. En el pasado, ha sido confundida con serpientes venenosas y lamentablemente atacada injustificadamente.
El impacto del clima y la intervención humana
El director de Protección Civil también señaló que las altas temperaturas que se están registrando en la región podrían estar provocando que las serpientes y otras alimañas abandonen sus madrigueras en busca de lugares más frescos.
Además, mencionó que las recientes labores de limpieza en el Río Monclova podrían haber alterado el hábitat de estas especies, lo cual explicaría su mayor presencia en áreas urbanas.
“Al remover zonas naturales, muchos animales pierden su espacio y se ven obligados a desplazarse. Esto no significa que estén invadiendo, sino que nosotros estamos afectando sus entornos”, añadió.
No atraparlas ni matarlas: la clave es llamar a las autoridades. El mensaje de Protección Civil es claro: no se debe intentar capturar, agredir ni matar a las serpientes. En caso de un avistamiento, lo más prudente es comunicarse de inmediato con Protección Civil o el cuerpo de Bomberos de Monclova, quienes cuentan con personal capacitado para manejar este tipo de situaciones de forma segura y profesional.
Rescate sin violencia
Uno de los aspectos que más destacan las autoridades es el protocolo de actuación del cuerpo de Bomberos ante estos casos. Lejos de exterminarlas o capturarlas agresivamente, los bomberos siguen un procedimiento diseñado para no causarles daño.
“Nuestro equipo está capacitado para el manejo de fauna silvestre. Cuando recibimos un reporte, acudimos con el equipo adecuado, procedemos a la captura controlada de la serpiente, asegurándonos de que no sufra ningún tipo de lesión, y posteriormente la reubicamos en su hábitat natural”, explicó Pedro Alvarado.
Precaución con la serpiente de cascabel, Aunque la mayoría de los avistamientos recientes han sido de especies inofensivas, Alvarado advirtió sobre la posible aparición de serpientes de cascabel, una especie que, aunque no es común en zonas urbanas, sí representa un riesgo por su veneno hemotóxico.
“La serpiente de cascabel no suele atacar a menos que se sienta amenazada, pero su mordedura puede ser mortal si no se trata a tiempo”, explicó el director.
Convivencia responsable con la fauna silvestre. "Este llamado es una oportunidad para fomentar una mayor educación ambiental y convivencia responsable con la fauna silvestre. Las serpientes, como cualquier otro animal, cumplen un rol esencial en el equilibrio de los ecosistemas. Protegerlas no solo es una cuestión legal, sino también ética y ecológica. La conservación de especies protegidas es un compromiso colectivo que empieza por el respeto y la información", finalizó el director.
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