Texas logra reducción histórica del 85 por ciento en cruces ilegales
Este logro, anunciado recientemente por Abbott, contrasta fuertemente con la situación en otros estados fronterizos, que han visto un aumento significativo en los intentos de cruce ilegal.
El estado de Texas ha experimentado una reducción histórica del 85% en los cruces ilegales de indocumentados a lo largo de su frontera, una cifra que destaca la efectividad de las políticas y medidas de seguridad fronteriza implementadas bajo la administración del gobernador Greg Abbott. Este logro, anunciado recientemente por Abbott, contrasta fuertemente con la situación en otros estados fronterizos, que han visto un aumento significativo en los intentos de cruce ilegal.
Mientras que los cruces ilegales han aumentado en otras regiones fronterizas, Texas ha logrado contener y reducir significativamente el flujo migratorio.
Medidas. Esta situación subraya el éxito de las estrategias específicas adoptadas por el estado, en contraste con otros enfoques menos efectivos. Según analistas de seguridad fronteriza, la disparidad en las cifras entre Texas y otros estados se debe en gran medida a la combinación de barreras físicas, despliegue de personal y una agresiva política de disuasión.
Uno de los sectores más críticos y emblemáticos de la frontera texana es el sector Del Rio, que ha sido un punto caliente para los cruces ilegales durante años. Según las cifras recientes de la Patrulla Fronteriza, en una semana típica se detuvieron a 1,650 personas que intentaban cruzar ilegalmente al país a través de este sector, lo que promedia 235 detenciones diarias. Estas cifras, aunque todavía preocupantes, son una fracción de las observadas en los momentos más críticos de la crisis migratoria, cuando hasta 3,000 personas cruzaban en un solo día por áreas como Eagle Pass, una localidad que ha sido foco de los esfuerzos de seguridad fronteriza. En épocas anteriores, la falta de barreras efectivas y la limitada presencia de personal en la frontera permitieron que miles de migrantes cruzaran la frontera en un solo día, saturando los recursos de las autoridades locales y federales. Hoy en día, gracias a la implementación de nuevas medidas, las cifras han disminuido drásticamente y la situación en el sector Del Rio se ha estabilizado considerablemente.El gobernador Abbott ha sido claro en su enfoque hacia la seguridad fronteriza, poniendo en marcha una serie de medidas que han sido fundamentales para la reducción de cruces ilegales. Una de las más visibles es la triplicación de las barreras de alambre de púas a lo largo de la frontera. Estas barreras no solo sirven como un impedimento físico, sino que también tienen un efecto disuasorio, obligando a los posibles migrantes a reconsiderar sus intentos de cruzar. En Eagle Pass, una localidad que ha estado en el centro de la crisis migratoria, el despliegue de los militares estatales ha sido esencial. Estos efectivos han estado instalando extensiones de alambre.
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