Rosario: Niña que vive el abandono de su madre

La menor que huyó de sus secuestradores el pasado miércoles en la colonia Hipódromo nunca ha ido a la escuela y padece de una condición mental.

Creció sin un padre y con una madre que hace 4 meses la abandonó dejándola encargada con su tío para ella irse con su pareja a hacer una nueva vida, sumándole que jamás ha asistido a la escuela, no sabe leer ni escribir y padece de una deficiencia mental, este es el panorama de Rosario ‘N’ la pequeña de 12 años que el pasado jueves huyó de las personas que la tenían privada de su libertad en la colonia Hipódromo. 

Tocamientos en sus partes íntimas, hematomas y raspones es lo que, refleja el inocente cuerpo de la menor, quien afortunadamente no fue víctima de violación, de acuerdo a los exámenes realizados por un médico legista, declaró Martha Herrera, subprocuradora de la Procuraduría de los Niños, las Niñas y la Familia, quien ahora es encargada de interponer la formal denuncia por el abuso sexual y secuestro que Rosario ‘N’ vivió, la dependencia se abocará en darle la protección que siempre ha merecido, pero que evidentemente jamás había recibido.    

Esclarecimiento. Pese a la condición mental de la menor, Martha Herrera, dijo que pudo identificar a quienes fueron sus agresores y el calvario que la hicieron pasar.

La noche del miércoles, la subprocuradora atendió el caso de la niña, a la que encontró en estado de shock postraumático. 

Su estado mental no sabe definir el tiempo, por lo que sospechan, no fueron tres días los que estuvo presuntamente privada de su libertad, sino uno o dos. 

¿Dónde está Rosario? Aunque pudieron ser menos de tres días nadie notó su ausencia, no había ni un solo reporte de desaparecida, su tío manifestó que, nunca se dio cuenta, él trabaja todo el día y se enteró hasta que Rosario ‘N’ llegó una tarde corriendo a la casa para pedirle ayuda porque los vecinos le habían hecho cosas muy malas.  

Luego de este trago amargo, Rosario ‘N’ será enviada con una familia de apoyo y de no encontrar, quedará bajo el cuidado de la Procuraduría al mismo tiempo de recibir atención psicológica.