'Hay corazones tristes que necesitan alegría'.
En los bares, restaurantes y taquerías de la ciudad de Monclova, un hombre se destaca por su presencia vibrante y su música contagiosa, se trata de Ricardo Sánchez Martínez, conocido cariñosamente como "La Chiva", es un músico que noche tras noche sale de su hogar para llevar alegría a los ciudadanos con sus canciones.
Al comenzar a trabajar ¿Qué lo motivó a convertirte en músico callejero?
"Hay muchos corazones que están muy tristes hoy en día, y siento que es mi deber alegrar a esas personas. Todos enfrentan problemas personales y laborales, y creo que mi música puede llegar a ser un alivio para ellos".
Este trabajo es peculiar, no todos se atreven a hacerlo ¿Cómo describiría su experiencia al cantar para diferentes públicos?
"Me encanta cantar para personas de todas las edades. Sin embargo, ver a los niños disfrutar de mi música me llena de felicidad. Además de cantar, vendo mazapanes y cacahuates para complementar mi show. Llevo más de siete años haciendo esto, y es mi forma de vida".
¿Dónde vive y cómo se ha hecho conocido en Monclova?
"Vivo en la colonia Hipódromo de Monclova, pero ya soy conocido en muchos restaurantes de la ciudad. Siempre me dan la oportunidad de cantar y pedir propinas. Mis clientes son los que me mantienen y me dan de comer, les debo mucho respeto porque me permiten seguir adelante con mi trabajo".
¿Cuál es su objetivo de cada noche al salir a cantar?
"Aunque estoy solo, sin hijos ni esposa, salgo a la calle todos los días con alegría y dedicación. Mi único objetivo es transmitir alegría. Al llegar a un lugar, observo las caras de las personas y noto la tristeza en algunas. Pero logro sacarles una sonrisa con mis canciones y mi baile".
Al cantar a diario frente a un público ¿Cómo lo reciben los clientes y qué impacto cree que tiene en ellos?
"Con mis ganas de que me logren escuchar y mi música, me paseo por los establecimientos, interactuando con la gente y creando un ambiente agradable. A menudo, los clientes me esperan con entusiasmo porque saben que mi presencia garantiza una noche divertida y diferente. Me he ganado el reconocimiento y el cariño de muchos por esto".
Ya se ha convertido en una figura emblemática en Monclova ¿Cómo es su sentir ante tal aceptación?
"Estoy feliz de tener esta capacidad para conectar con las personas a través de la música y esto me ha permitido ganarme un lugar especial en la comunidad. No quiero que conozcan a "La Chiva" solo como un músico, si no, como un símbolo de alegría y esperanza para aquellos que necesitan un respiro en sus vidas cotidianas".
¿Qué es lo que nota en su público al verlo bailar y escucharlo cantar?
"Ahora sé que para muchos, mi presencia en los bares y restaurantes no solo es un espectáculo, sino una fuente de felicidad. Este trabajo requieren de mucha pasión y dedicación, se puede transformar la vida de las personas, una canción a la vez, es una gran responsabilidad para mí, pero estoy muy feliz de poder cumplir con ella".
¿Qué significa este trabajo para usted?
"Esto no solo es un medio de sustento, sino una misión personal. Mis clientes son los que me mantienen y me dan de comer, A ellos les debo mucho de lo que he podido lograr, pues todos los días me dan la oportunidad de seguir haciendo adelante mi trabajo, el cual me gusta mucho".
¿Qué se necesita para llegar a cada persona que lo escucha?
"La humildad siempre hace que el espectáculo sea memorable. Los niños ríen, los adultos cantan y todos disfrutan. Ricardo Sánchez Martínez, "La Chiva", es más que un artista callejero; es un faro de esperanza y alegría en la vida de muchos monclovenses. Con su guitarra en mano y una sonrisa en el rostro, continúa su misión de iluminar las noches de Monclova, una canción a la vez.
