Esta tarde se inició el retiro de las vallas de tres metros que el gobierno federal había instalado para proteger el Palacio Nacional de protestas y manifestaciones.
La acción se produce un día después de que el plantón de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se retirara del Zócalo de la Ciudad de México. A partir de las 16:00 horas de este miércoles, trabajadores de una empresa particular comenzaron a desmontar las pesadas estructuras ubicadas en los accesos de las calles Moneda y Corregidora. Estas vallas se habían instalado desde la noche del 14 de mayo como medida de protección previa a la marcha y plantón de la CNTE con motivo del Día de la Maestra y el Maestro.
El 15 de mayo, el presidente Andrés Manuel López Obrador justificó la colocación de las vallas metálicas afirmando que eran para prevenir la violencia y que podrían ser retiradas después de las elecciones del 2 de junio. En su conferencia mañanera, el presidente explicó que, en medio del proceso electoral, había quienes deseaban que su gobierno respondiera con represión.
López Obrador enfatizó que "vale más prevenir" y mencionó que algunos conservadores deseaban ver el recinto histórico en llamas. Reiteró que los muros metálicos eran una medida para evadir el acoso y no caer en la trampa de la violencia durante las elecciones.
"Hay quienes quisieran que hubiera represión. Son tiempos de zopilotes, tenemos que actuar con mucha prudencia. Presencia, paciencia y prudencia, así como se necesitan las tres C: cabeza, corazón y carácter. Por eso es mejor prevenir porque hay muchos infiltrados", declaró el presidente.
