Desde la semana pasada han llevado a cabo manifestaciones, donde se han registrado destrozos en instalaciones gubernamentales
Tras la irrupción violenta de esta mañana a Palacio Nacional, normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, refrendaron su exigencia hacia el presidente Andrés Manuel López Obrador de entablar un diálogo y tener resultados sobre la desaparición forzada de 43 de sus compañeros ocurrida desde el 26 de septiembre de 2014.
Desde la semana pasada, el 27 de febrero, padres y madres de los normalistas de Ayotzinapa instalaron un plantón en el Circuito de la Plaza de la Constitución, frente a Palacio Nacional, para demandar al Ejecutivo resultados en las investigaciones.
Por casi 10 años, los familiares de las víctimas y los normalistas han exigido “justicia y castigo” para los responsables, pero sobre todo conocer el paradero de los estudiantes.
Los normalistas y los padres de los desaparecidos dieron que se quedarían en plantón hasta reunirse con el presidente López Obrador y que el Ejército entregue archivos con información que demandan, que es clave para resolver el caso.
El lunes pasado, familiares de los normalistas se manifestaron afuera de las instalaciones del Centro Federal de Arraigos de la Fiscalía General de la República (FGR), para protestar por la falta de justicia.
Durante su protesta lanzaron petardos y con un camión derribaron una de las puertas de acceso de las instalaciones de la FGR.
El 28 de febrero pasado, un grupo de normalistas lanzaron petardos al interior de la sede del Senado de la República, en Paseo de la Reforma, donde producto de una de las detonaciones se reventó una puerta de vidrio.
Dos días antes, el 26 de febrero, acudieron a la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) que atacaron con petardos, realizaron pintas y exigieron restablecer un el diálogo con el Presidente de la República.
