Proximidad social, capacitación y se coordina con las diferentes instancias en materia de seguridad.
Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) y el Instituto Nacional de estadística y Geografía (INEGI), la Policía Municipal de Saltillo se ubica como la segunda más efectiva de la nación.
José María Fraustro Siller, alcalde de la ciudad capital, dijo que los logros se alcanzaron con el trabajo coordinado con el Gobierno del Estado, encabezado por Manolo Jiménez Salinas, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.
La Policía de Saltillo, añadió Fraustro Siller, se caracteriza por su proximidad social, su capacitación y porque se coordina con las diferentes instancias en materia de seguridad. “En Saltillo tenemos una policía que es profesional y en acción con el gobierno estatal, el fortalecimiento de la corporación es continuo, señaló.
Seguridad. En la presente administración, dijo se ha dado un fuerte impulso a la corporación con la compra de patrullas, entrega de equipo y uniformes, mejoras a las condiciones laborales y la implementación de un proceso de promoción para otorgar los ascensos a través de méritos individuales.
Fraustro Siller apuntó que Saltillo es una ciudad segura y en paz que da tranquilidad a las familias y eleva su calidad de vida, además de que es un factor importante para fortalecer la competitividad y la atracción de inversiones privadas.
Finalmente, el edil exhortó a quienes integran la Comisaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Saltillo para que sigan dando su mejor esfuerzo y se mantengan cercanos a la población, a fin de que la ciudad permanezca entre las más seguras de México.
En un contexto donde la seguridad ciudadana se erige como una prioridad ineludible, Saltillo se embarca en la noble tarea de forjar una fuerza policial que no solo responda a los estándares locales, sino que aspire a ser reconocida como una de las mejores a nivel nacional. La importancia de contar con una policía calificada radica no solo en la salvaguarda de la integridad de los ciudadanos, sino también en la construcción de un entorno propicio para el desarrollo social y económico de la región. El carácter ejemplar de una policía bien entrenada se manifiesta en la capacidad de prevenir y combatir eficazmente la delincuencia.
La excelencia en la formación de los agentes no solo se traduce en la disuasión de actos delictivos, sino que también promueve una relación de confianza entre la comunidad y las fuerzas del orden. Esta conexión estrecha entre la policía y la sociedad es fundamental.
