El magnate de la tecnología y cerebro detrás de Tesla y SpaceX, Elon Musk, ha anunciado un hito significativo en la innovación tecnológica con su empresa Neuralink.
Esta semana, reveló que Neuralink ha logrado con éxito implantar un chip cerebral en un ser humano, marcando un avance revolucionario en la neurotecnología.
El chip, denominado N1, tiene un diámetro de 8 milímetros y está equipado con 64 cables ultrafinos, conocidos como "hilos". Elon Musk afirma que este dispositivo, apodado Telepathy, permitirá a los usuarios controlar dispositivos como teléfonos y computadoras con tan solo pensar. Además, destacó que los resultados iniciales muestran una prometedora detección de picos neuronales.
El enfoque quirúrgico utilizado por Neuralink involucra un robot diseñado para insertar los hilos de manera precisa en el cerebro, evitando tocar venas o arterias. Este método, según expertos, ha sido aplicado en la comunidad biomédica durante dos décadas, especialmente en neuronas que controlan el movimiento de extremidades.
Pedro Maldonado, profesor de Neurociencia en la Universidad de Chile, explicó que la lectura de estas neuronas puede traducirse en comandos para dispositivos robóticos o incluso para el propio cuerpo.
Nicolás Silva, director de Tecnología de Asimov Consultores, agregó que el chip de Neuralink utiliza el machine learning para registrar la actividad neuronal y entrenar algoritmos de inteligencia artificial, mejorando con el tiempo la interpretación de las señales cerebrales.
Sin embargo, la noticia ha generado diversas preocupaciones. Alejandro Casas, Jefe de Tecnología e Inteligencia Artificial de Ewine, mencionó inquietudes sobre la seguridad del dispositivo, particularmente en relación con la batería de litio y posibles interferencias con otras áreas cerebrales.
También se resaltó la posibilidad de alteraciones a largo plazo en el funcionamiento normal del cerebro, así como la preocupación por la privacidad y seguridad de datos durante la cirugía.
A pesar de los avances, algunos expertos piden cautela ante las grandiosas afirmaciones de Elon Musk. Liset Menéndez de la Prida, investigadora del CSIC, indicó que el anuncio de Neuralink es un progreso en la fase de prueba de un implante cerebral y de la técnica quirúrgica, y recordó que otras empresas también compiten en este campo.
Aunque la comunidad científica reconoce los avances en las interfaces cerebro-ordenador, insta a la prudencia y a una comunicación responsable sobre los límites y riesgos de estas tecnologías emergentes.
